Tiempo en Asturias | 'Álex' deja los ríos al límite y el aeropuerto con goteras

Asturias se mantuvo en aviso por fenómenos costeros hasta ayer a medianoche. Si bien el del viernes era naranja, el del sábado y domingo fue amarillo. La boya del puerto de Gijón llegó a registrar olas de ocho metros. La previsión es que tales avisos no se repitan a lo largo de la semana en el litoral asturiano. El cántabro y vasco sí se mantienen en aviso al menos hasta el martes.

En cuanto a las precipitaciones, en Colunga fue donde más llovió durante todo el fin de semana. El viernes llegó incluso a ser la tercera localidad de España con más litros de agua por metro cuadrado (97,6). Las intensas lluvias pusieron en jaque los cauces de los ríos asturianos. La Confederación Hidrográfica del Cantábrica (CHC) llegó a activar el sistema de seguimiento sobre los ríos Negro, en Luarca (Valdés); Raíces, en Salinas (Castrillón); Ponga, en Santillán (Amieva); Sella, en Fuentes (Parres) y Cares, en Mier (Peñamellera Alta).

Tras Colunga, la zona de el aeropuerto fue también de las más afectadas por las lluvias. Tanto es así que durante este fin de semana llovió tanto como en todo octubre de 2019, dejando importantes goteras en el interior de la terminal al colarse el agua en plenas obras en el sistema de climatización. Como estaba previsto, la borrasca en su último día en el Principado dejó fuertes chubascos intermitentes en la región y especialmente abundantes en Gijón, al punto de que la carretera que une Veriña con San Andrés de los Tacones, a la altura del acceso a la ZALIA, amaneció anegada por las lluvias y un vecino precisó de asistencia para poder sacar su vehículo. «En San Andrés ni siquiera hay alcantarillado», lamenta Bryan Calvo, vecino del concejo de Fresno, que denuncia que «nadie limpia los arroyos ni los caminos; es una situación que se repite cada año».

La borrasca abandona Asturias, no así las lluvias. Para esta semana se prevén cubierto con probables lluvias débiles y chubascos ocasionales.