Los turistas disfrutan de Asturias por los cuatro costados

El Viernes Santo cubrió de nubes el cielo del Principado, sin embargo, la temperatura mantuvo estable el mercurio y los turistas que abarrotan Asturias esta Semana Santa no aplazaron sus planes. Las principales ciudades, Gijón, Oviedo y Avilés volvieron a registrar otra jornada de récord de visitantes y una alta ocupación que se mantendrá hasta el domingo. Las procesiones religiosas del Santo Entierro congregaron a un buen número de fieles en las tres localidades. Los cascos históricos, las sidrerías más populares y las zonas monumentales presentaron una masiva afluencia de público durante todo el día. En Gijón también se concentraron en el entorno de la playa de San Lorenzo y el recinto ferial, donde se celebró la Gran Mariscada. Los paseos marítimos de Candás, Luanco, Cudillero, Luarca o Navia también fueron testigos de la elevada presencia de visitantes. Otros, en cambio, optaron por las rutas de montaña del área central y en la senda del Oso, por ejemplo, predominó el turista nacional de familias con niños.

La comarca oriental volvió a registrar una jornada más de lleno absoluto. La ruta del Cares, Bulnes y los lagos de Covadonga, así como el entorno de la Basílica, fueron visitas obligadas para los turistas que buscaron el paisaje de los Picos de Europa. El plan especial de transporte al Parque Nacional, que se mantendrá hasta el domingo, funcionó sin destacar incidencias. Los turistas, pese a la bruma que deparó el día, se mostraron satisfechos en un continuo ir y venir de autobuses lanzadera. En Cangas de Onís las terrazas se encontraban a rebosar al igual que en la capital llanisca. En la plaza de Parres Sobrino la estampa era como en verano al igual que en el puerto deportivo y en el paseo dela playa del Sablón. Gulpiyuri y San Antolín también fueron puntos de elevada concurrencia.

La misma instantánea se pudo contemplar en Lastres (Colunga) mientras que en Ribadesella hubo cerca de 25.000 personas en las tradicionales carreras de caballos de la playa de Santa María. A pesar de todo, no se registraron incidencias en el tráfico rodado.

La hostelería asturiana se frota las manos estos días ante el aluvión de clientes. En restaurantes y sidrerías tienen doble turno de comidas y cenas para poder acoger la alta demanda y las terrazas se encuentran llenas. Los campings de la región también han colgado el cartel de completo en muchos casos. En Deva (Gijón), por ejemplo, la ocupación es del cien por cien debido a la celebración según explicó el gerente, Tony Amieva, de un torneo de fútbol, la Oviedo Cup, que reúne a 6.000 niños de 8 a 16 años.

Las casas de turismo rural registran esta Semana Santa una ocupación en torno al 95%, según el presidente de Fastur, la patronal rural, Adriano Berdasco, según quien se está moviendo un poco más que el año pasado. El vicepresidente de Otea y portavoz de hotelería, Fernando Corral, explicó que estos días festivos tenemos una ocupación casi llena en toda la geografía del Principado lo que ha llevado al sector a un repunte en los precios. La noche del Viernes Santo al sábado es la que más demanda registró de estos tres días. Los hoteleros consultados han coincidido en señalar que esta Semana Santa han apreciado que las reservas se han hecho con mayor antelación. Los empresarios intentan ganar estos días más público durante la noche del domingo. Por este motivo, realizan descuentos de hasta un 60% en algunos casos sobre la tarifa habitual para intentar llenar un día más. Y es que estos días Asturias está colapsado de turistas que se echan a la calle para disfrutar de este puente festivo. La preocupación, en cambio, de los empresarios es llenar el resto del año. En este sentido, piden más esfuerzo por lograr la desestacionalización porque como bien dicen estos cuatro días siempre llenamos pero el problema es el resto del año.

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