«Esta zona tenía mucha maleza», critican los vecinos de La Fresneda

La actuación de los bomberos y la acción del viento, que alejó el fuego de las casas, contribuyó el lunes a tranquilizar a los vecinos de la urbanización

S. RODRÍGUEZ NORIEGA

Miércoles, 30 de diciembre 2015, 00:21

Los vecinos de La Fresneda se recuperaban ayer del susto, tras vivir durante el lunes una jornada intensa por el incendio declarado en La Belga, a escasos metros del comienzo de la urbanización sierense. Era el tema del que todos sin excepción hablaban, al tiempo que las miradas se iban hacia el terreno calcinado.

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Algunos vecinos mantuvieron sus rutinas de salir a pasear y practicar deporte por el entorno de la urbanización, aunque en esa zona el olor a quemado era intenso y el panorama, desolador. Salvo el camino embarrado, todo era negro, con las casas de La Fresneda a un lado y las de Soto de Llanera a otro.

«Al principio, al ver cómo se quemaba, estábamos asustados. Pero después, con los bomberos, todo se calmó. Esto ya quemó hace años, cerca de ocho creo recordar. Es un terreno con monte bajo, con mucho matojo que arde enseguida», explicaba Santiago Laviana a su regreso de un largo paseo.

«Esta zona la conozco bastante bien porque suelo venir a hacer deporte y tenía mucha maleza», apuntó Belarmino Medio. El día anterior siguió el avance de las llamas «con los críos. Lo vimos desde la rotonda de abajo, donde se podía apreciar que el viento llevaba el fuego hacia arriba y afortunadamente no hacia La Fresneda».

Marcial Martínez, propietario de un picadero a escasos metros de la zona afectada, inspeccionaba ayer el entorno a caballo. «El fuego llegó casi hasta el picadero. Lo que se quemó es todo matojo que quedó arrasado en puntos donde no se limpiaba y se había generado maleza», constató. Una de sus principales preocupaciones el pasado lunes eran los animales de una finca cercana. «Había unas yeguas en un prado al que se aproximó el fuego, pero ellas solas se retiraron hacia arriba huyendo del incendio», señaló.

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Desde donde también contemplaban atónitos las llamas que iban avanzando fue desde el campo de golf de La Fresneda. La zona en la que se produjo la quema está separada de las instalaciones deportivas por un camino y un pequeño río, pero los usuarios que «se encontraban en los hoyos tres y cuatro tenían las llamas detrás ya que se encuentran en la parte de abajo», relató la encargada de la cafetería, Almudena Martín que comentó que al principio, debido a la rapidez con la que el fuego se propagó, «pensamos por momentos que podía llegar hasta el campo». La alarma desapareció en el instante en que comprobaron que «era complicado» que el fuego les alcanzara «porque el viento soplaba hacia el otro lado».

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