El gijonés Bernardo Entrialgo analiza el rendimiento deportivo en el mexicano Club Pachuca. E. C.

«El fútbol en México es muy diferente»

El gijonés Bernardo Entrialgo trabaja en el Club Pachuca, donde además ejerce como ojeador, lo que le permite recorrer el país

Ana Ranera

Gijón

Domingo, 6 de febrero 2022, 17:44

Hay veces que la vida se porta y convierte los sueños en una realidad. A Bernardo Entrialgo (Gijón, 1998) le ocurrió este verano, a unos cuantos kilómetros de casa, en México, a donde había ido a pasar sus vacaciones. «Tengo familia aquí y en julio ... vine a visitarlos», empieza contando su historia. Durante esos días de descanso, este preparador físico aprovechó para conocer el Club Pachuca, con el que llevaba tiempo colaborando, aunque fuera a distancia. «Tenía un contacto en el equipo y los ayudaba y, cuando fui en persona, directamente me propusieron que me quedara», explica.

Publicidad

Él allí se encarga del análisis de rendimiento individual de la cantera y, además, ejerce como ojeador. «Estudié Ciencias de la Actividad Física y el Deporte y luego un máster sobre metodología y valoración del rendimiento en fútbol», relata. Esa formación ya lo introdujo en el mundo del balompié, donde empezó su andadura en el Racing de Santander. «Hice allí unas prácticas y luego trabajé como preparador físico del San Martín», señala.

Después de esa aventura en la cuenca minera, tenía previsto incorporarse al Llanera, pero le surgió la oportunidad mexicana y no tuvo dudas por la dimensión del proyecto. «El Club Pachuca es muy grande, tiene equipos en muchos sitios. Juega en la primera división de este país, es realmente muy conocido», se enorgullece.

Eso hace que Bernardo esté entusiasmado con el proyecto, y eso que la vida por allí es «muy tranquila», apunta. «Esta ciudad no tiene nada especial, más allá de la comida», cuenta. Eso sí, muy cerca de su nuevo hogar, hay muchos rincones que merece la pena descubrir. «Está rodeada de pueblos mágicos», añade.

Igualmente, este gijonés no pasa demasiado tiempo en casa, porque, como ojeador, le toca muchas veces viajar por el país, en busca de nuevos talentos. «A menudo, tengo que salir y, todos los fines de semana, me desplazo con el equipo a los partidos».

Publicidad

Después de seis meses en Pachuca, tiene claro que le gustaría quedarse por allí. «Mi idea es seguir en México e ir viendo cómo se me van presentando las oportunidades», cuenta. «No me cierro ninguna puerta, lo único que tengo claro es que quiero seguir viviendo de esto». Ya es bastante lo que sabe, y quién se lo hubiera dicho cuando empezó y todo le parecía muy distinto. «Me costó bastante adaptarme al principio, porque es una cultura distinta de trabajo», relata.

Para lidiar con las diferencias, Bernardo acordó con el club poder venir dos veces al año a España, y esos son los momentos en los que toca conectar con la familia y con los amigos, esos que tanto extraña desde México. «Me encanta volver, estar con ellos y salir a correr e ir a la playa», dice, a falta de unos pocos meses para estar, de nuevo, recorriendo el Muro, al abrigo de los suyos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad