Investigan una brutal paliza a un hombre en su casa de Venta les Ranes

Ahora la Guardia Civil investiga una posible relación entre varios hechos que tuvieron lugar en las horas anteriores al ataque en el domicilio antes citado. En concreto, la central del instituto armado recibió una llamada telefónica la noche del domingo alertando de que la tripulación de una lancha se encontraba descargando paquetes de la dimensión de una maleta que a su vez eran recogidos por tres vehículos todoterrenos. El informador aseguró que estos coches desaparecieron de la escena en cuanto tuvieron la carga en los vehículos. Esta denuncia movilizó a varios efectivos de la Guardia Civil que rastreó las carreteras de la zona para comprobar de qué cargamento se trataba. Se da la circunstancia de que la Guardia Civil se encontró en el puerto lastrino con una patrullera de la Agencia Tributaria que a su vez acaba de preguntar a un pescador que se encontraba en la zona si había visto algo sospechoso negando éste haber presenciado nada raro durante el tiempo que estuvo en la mar.

Unas horas más tarde la Guardia Civil vuelve a recibir una llamada telefónica de un anónimo que asegura haber visto un coche Mercedes de color negro con cinta aislante o cinta americana en las matrículas lo que hace sospechar que estaban modificadas.

Al día siguiente, el lunes a las tres de la mañana, se produce el mencionado ataque a un hombre en su casa de Venta les Ranes. En principio nada hace pensar que los distintos sucesos puedan tener relación, pero los investigadores quieren aclarar varios aspectos. El primero, las razones por las que los agresores se ensañaron de tal manera con la víctima a la que además robaron una cantidad de dinero importante. Y, finalmente, quieren comprobar si los distintos sucesos, consecutivos todos ellos y prácticamente, en una misma zona, pudieran tener alguna relación.

Cabe recordar que hace justo una semana una lancha tuvo que ser rescatada en alta mar por el Helimer del Cantábrico y al proceder al rescate la tripulación del helicóptero se encontró con varios fardos de droga flotando en el agua. Tras esa investigación se conoció que las fuerzas de seguridad esperaban la llegada de una embarcación con un alijo de droga a la costa asturiana, convertida en un lugar alternativo a la entrada gallega de la droga a Europa por parte de los narcos. El alijo encontrado por el 'Helimer' y que superó los 400 kilos iba a ser introducido por Muros del Nalón.