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Celso, junto a la casa de la víctima, precintada por la Guardia Civil. DAMIÁN ARIENZA
«Si llegamos a abrir la puerta podríamos estar también muertos»

«Si llegamos a abrir la puerta podríamos estar también muertos»

Celso y Luisa, los vecinos a los que Miguel Muñiz pidió ayuda, temieron por su vida. «Pasamos mucho miedo hasta que llegó la Guardia Civil»

Olaya Suárez

Soto de Ribera

Miércoles, 10 de abril 2024, 02:00

Celso y Luisa no durmieron ayer «ni medio minuto». Hacia las once de la noche tenían que poner, ayer, rumbo al cuartel de Rubín de la Guardia Civil para relatar «la pesadilla» que les tocó vivir la noche del lunes en el tranquilo barrio de ... El Picón. «Parece una pesadilla, no lo acabamos de creer», decía este matrimonio que lleva residiendo toda la vida en Soto de Ribera, en vecindad apacible con la víctima y el presunto parricida.

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