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El 3 de abril de 1979 cambió la vida de muchos asturianos, pero en especial de 78 personas que se convirtieron en alcaldes. Ayer la Asociación de ex alcaldes y ex alcaldesas de Asturias (Aexa), presidida por Francisco González Méndez, quien fuera alcalde de Cudillero, ... celebró el cuadragésimoquinto aniversario de las primeras elecciones municipales tras la dictadura. La asociación, que celebró su asamblea general, homenajeó a los 29 alcaldes de aquel primer mandato en Asturias que están vivos; acudieron la gran mayoría. Un acto de reconocimiento en que también se honró la memoria de aquellos exalcaldes que ya fallecieron.
Los testimonios que dieron aquellos primeros alcaldes, muy emocionados y agradecidos por este reconocimiento de sus compañeros, coincidían en «la poca experiencia política» y «los muchos problemas» que había, por ejemplo, en las zonas rurales «con accesos intransitables y falta de saneamiento» como problemas claros. Pero también había «ganas de trabajar, de transformar y respeto entre todos los partidos, entre personas que no nos conocíamos», explicó José Sierra Fernández, alcalde de Grado por el PCE de 1979 a 1995.
Ricardo Quintana López, quien accedió a la Alcaldía de Illas con Coalición Democrática en 1979 para seguir revalidando el cargo hasta 1991, con AP y el PP, fue uno de los asistentes, a pesar de «estar luchando contra la enfermedad». «Quería estar aquí», remarcó. Menos tiempo en el cargo estuvo Juan Carragal García, regidor de Cudillero desde el 3 de abril de 1979 al 17 de enero de 1980.
José Álvarez de la Prida fue alcalde de Allande de 1979 a 1983 y daba las claves del trabajo de aquellos primeros mandatos democráticos. «Nos encontramos con muchas dificultades, muchos pueblos sin accesos, sin saneamiento. Mucho por hacer».
En Aller, los problemas era similares, Antonio García Barettino, alcalde por UCD de 1979 a 1983, recordaba ante sus compañeros que «fueron buenos tiempos, pero no teníamos ni idea de política». «Tomé posesión acompañado de una huelga de funcionarios que pedían una subida de salarios», añadió. Entre los alcaldes más longevos de Asturias se encuentra el socialista Roberto Pérez López, que en 1979 se hizo con la Alcaldía de Belmonte de Miranda, conservándola hasta 2011, quien destacó el orgullo de «haber contribuido a ayudar a mi pueblo».
Con el puño en alto ,el que fuera regidor de Bimenes por el PCE entre 1979 y 1999, Joaquín García, se acordó de como «desperté curiosidad pero mis vecinos confiaron. Viví como alcalde la etapa más importante de vida».
Y los hay que siguen en activo, como el actual teniente alcalde de Lena, Juan Malllada Álvarez, alcalde de Quirós por el PCE de 1979 a 1987.
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