Perros y juguetes: la iniciativa de una peluquería de Lugones para atender a niños con autismo

Así, la perra 'Boni' (de 'Bonita') acompañó al pequeño Xuan López, de ocho años, desde que entró por la puerta este miércoles, el primer día del nuevo proyecto. Entretenido y tranquilo, Xuan no se separó de la labrador en ningún momento y, en apenas quince minutos, ya pudo estar sentado en la silla con la cabeza de la perra en su regazo, animándole.

Esto resultó ser un alivio para la ovetense AnnMarie Pérez, madre de Xuan, consciente de lo mal que lo pueden llegar a pasar. «Esto les ayuda a bajar su estado de alerta, reduce el estrés, porque unas tijeras o una maquinilla no hacen mucho ruido, pero le asusta», dijo mientras observaba cómo Xuan permanecía quieto. 'Boni' hizo su magia y el pequeño se relajó casi de inmediato, consiguiendo que «el corte de pelo sea más llevadero», tanto para él como para el peluquero.

Xuan, acostumbrado a terapias con perros, se adaptó fácilmente, aunque su madre admitió que «esto no puede funcionar para todos los casos». Madre e hijo empezaron a ir a esta peluquería tras descubrirla en redes, después de que una madre de la Asociación Nora hablara del negocio que había integrado juegos pensados para niños con autismo, con pictogramas y figuras que mostraran los objetos de la peluquería. Él ha sido el primer cliente del programa con perros y explicó los beneficios que pueden traer esto animales, simplemente por «el tacto; al ser diferente y más directo, les tranquiza».

Junto a ellos estaba Hortensia Vidal, trabajadora de la asociación y adiestradora de la perra, vigilando en todo momento que el niño no perdiera el enfoque en 'Boni'. Acostumbrada a ambientes en residencias de mayores, de discapacidad intelectual o centros educativos, la propuesta de participar les pareció «súper interesante» y muy acorde a lo que ellos trabajan. «Muchas veces olvidamos lo hostiles que pueden ser algunos sitios para los niños autistas, como ir al dentista o, como en este caso, al peluquero», destacó. Definiéndolo como algo «súper bonito», decidieron colaborar y, en función del éxito de la primera sesión, se pactará el servicio de apoyo de perros dos días a la semana, en el horario de atención al cliente especial que tienen para niños con autismo.

Este horario, explicó el dueño, David Álvarez, es entre las siete y las ocho de la tarde, el momento en el que no suele haber tantos clientes y la peluquería tiene ambiente más apropiado. «Empezamos con esto gracias a Esther, una madre con un niño con TEA y desde entonces nos hemos ido adaptando un poco. Nos han llegado niños de toda Asturias, principalmente de Oviedo, Gijón y Avilés», anotó.

Visto el cariño que 'Boni' despertó en el pequeño Xuan, en la peluquería Valdés no descartan volver a contar con ella y apuntan que cualquier familia que lo necesite puede acudir a este establecimiento para conseguir que «un corte de pelo sea una experiencia positiva para estos niños».