Las obras de la avenida Oviedo de Lugones «complicarán la vuelta al cole»

Durante los próximos dos meses, las obras de la segunda fase para renovar la avenida José Tartiere y la avenida de Oviedo afectarán especialmente a esta última, con reordenaciones de tráfico que, por ahora, se han saldado con el corte de uno de sus carriles –en sentido a Oviedo–, a la altura del cruce con la calle Puerto Pajares. «Yo ya lo estoy viendo, se va a colapsar todo», sostiene Eduardo Rodríguez, ovetense asiduo a la zona. Como conductor, suele entrar en la villa por el mismo punto y constata que «con la avenida abierta ya había problemas, así que afectará». Lo reseñable, continúa, son las líneas de autobús, pues «coinciden cuatro: la de Oviedo, Pola de Siero, Avilés y Gijón. A veces quedan parados aquí un buen rato, así que irá a peor».

A su lado, el sierense Francisco Canalís asiente. Consciente de que es «una carretera con mucho tráfico», el problema, apunta, «se veía venir» cuando se tomó la decisión de renovarla. «Lo de tener un solo carril tendrá que servir, pero tendría que haber empezado antes».

Ambos piensan en la inminente llegada de los últimos rezagados de las vacaciones de verano, aquellos padres que deberán llevar a los niños a clase en el inicio de curso, que comienza el día 10. «Siempre llenan de coches la avenida, en dirección a Oviedo». Y más en concreto –señala María Isabel Moreno, vecina de Lugones– en el punto donde ahora se han colocado las desviaciones y el corte de carril. Su puesto como cuponera junto a la rotonda del Cruce Viejo le sirve para ver, de primera mano, cómo avanza el tráfico en su primer día de cortes, pero también para adivinar cómo estará en pocos días. «Esto complicará la vuelta al cole, lo sé», dice.

Como conductora, ya tuvo que sufrir los primeros atascos a primera hora de la mañana pero, a su criterio, «aún no son grandes porque hay pocos coches». Se notará, apunta, «cuando haya movimiento real y lleguen los autobuses escolares. Será un caos en hora punta. Por eso, esta parte tendrían que haberla arreglado en verano».

Sin embargo, también tienen en cuenta el resultado: la sustitución del colector de saneamiento, el soterramiento de contenedores y la renovación del pavimento. «Son obras necesarias, porque en el Ayuntamiento no se gasta por gastar; así que hay que hacerlas, aunque es cierto que deberían haberlas comenzado antes», manifiesta Efrén Alonso, residente en la avenida afectada.

Mientras aguardan la evolución de los trabajos, confían en que no se retrasen demasiado y se cumplan los plazos.