Cáritas Koopera mira hacia el futuro y va apuntalando sus planes para seguir dando cada día un servicio más amplio en Asturias. Ahora, la entidad acaba de recibir el visto bueno definitivo, la autorización ambiental, a su centro de gestión de residuos textiles no peligrosos. ... Una autorización –expedida por la Consejería de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico– que permitirá incrementar la actividad que Cáritas Koopera presta en el Principado desde su planta en Siero, en el polígono Sía Copper. Asimismo, esta ampliación de actividades posibilitará reducir parte de las operaciones que la sede asturiana venía haciendo en la de Vizcaya, aunque no romperán la relación dado que se seguirá procesando parte del material allí.
Publicidad
El permiso recibido hace viable que las operaciones de clasificación se lleven a cabo en Asturias. La planta de Siero podrá tratar un máximo de doce toneladas al día y la capacidad total de almacenamiento se sitúa en 150 toneladas.
El proceso que se sigue en las instalaciones de Sía Copper consiste en, primero, la recogida, recepción, almacenamiento y agrupamiento, selección y clasificación, centro de transferencia y preparación para la reutilización de los materiales (ropa, tejidos, complementos, etc.) recepcionados. Además del almacenamiento de residuos y el emperchado de prendas preparadas para la reutilización; finalmente se lleva a cabo la expedición.
En el proceso de clasificación y selección se obtienen varios subproductos: uno, destinado a su reutilización, como prendas de segunda mano para su venta en tiendas dentro del territorio nacional. Otro, destinado a la reutilización en mercados internacionales y un tercero para la industria del reciclaje.
Publicidad
Existe otra fracción que, tras su clasificación no es susceptible de aportar ninguna posibilidad de reutilización o reciclaje. En este caso, se gestionará a través del envío a un gestor autorizado para su depósito en vertedero. Estas operaciones se harán de forma manual.
Son ya diez años los que Cáritas Koopera lleva en su planta sierense y fruto de la labor desarrollada en esta década resulta posible este paso adelante. Iniciativa que no será la única, ya que, explica la gerente, Aída Rodríguez, «tenemos que estar preparados para los nuevos retos». Retos que derivan de las nuevas normativas que emanan de Europa además de la ley de residuos que entrará en vigor el 1 de enero de 2025.
Publicidad
«Anticiparnos a las necesidades del sector», agregó, forma parte del día a día de la sede en Sía Copper. De hecho, la autorización recién emitida posibilita también que se pudiera preparar la ropa para su reciclaje. Aunque, matizó, de momento no está previsto desarrollar esta labor.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.