El acribillado a tiros en Llanera fue detenido en 2010 por montar un laboratorio de cocaína en Siero

De origen panameño, había residido durante varios años en Lugones, si bien, tras un paso por la cárcel, estableció su residencia en el Sur de España. Los agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Asturias tratan ahora de reconstruir los últimos días de Emiliano B. R. y conocer el motivo por el que estaba de paso en Asturias.

El juzgado de Instrucción número 1 de Oviedo ha decretado el secreto de sumario para preservar el avance de la investigación, que se antoja compleja y larga. El cadáver del hombre asesinado permanece en el Instituto de Medicina Legal a la espera de que los familiares se desplacen hasta el Principado para hacerse cargo de los restos mortales.

Fue asesinado de cuatro tiros descerrajados a muy corta distancia en la carretera AS-374 después de que, supuestamente, le tendiesen una trampa. Le pincharon las ruedas de su coche cuando entró en un bar para tomar una consumición y cuando salió, condujo durante varios metros y fue a la altura de la estación de tren cuando se bajó para comprobar el estado de las ruedas. En ese momento, desde otro vehículo, le tirotearon. Hasta cuatro disparos con un arma corta. El cadáver y los casquillos quedaron sobre el asfalto.

Todo apunta a un ajuste de cuentas. Es la principal hipótesis que tiene sobre la mesa el equipo de la Policía Judicial, que ha resuelto investigaciones tan laboriosas como la del asesinato del concejal de Llanes Javier Ardines.