Las corrientes traen al menos nueve focas recién nacidas a la costa

Nueve focas de menos de tres meses han sido localizadas en la costa asturiana. «Podrían ser el doble; llegaron por un temporal que sucedió antes de las Navidades, al norte de las islas británicas, y que generó las corrientes que las han traído hasta aquí justo después del destete», asegura Luis Laria, de la Coordinadora para el Estudio y la Protección de las Especies Marinas (Cepesma).

El conservacionista mandó ayer un comunicado solicitando la colaboración ciudadana tras tener noticia de que, lejos de ser bienvenidas, varios de los mamíferos están encontrando el hostigamiento de los vecinos. «Este fin de semana una de ellas fue mordida por un perro al que su dueño incitó, mordiéndola por las aletas traseras en la playa de Vega en el municipio de Ribadesella; está herida y desde el martes no la hemos vuelto a ver», indicó Laria.

El miércoles otro ejemplar «fue apedreado desde el espigón de san Juan de Nieva en la entrada del puerto de Avilés», indicó el presidente de la coordinadora, quien abundó que ayer el mismo animal fue objeto de una agresión parecida. «Todos los días recibimos llamadas a través del 112, policías portuarias, Guardia Civil o particulares que localizan» las focas, relató Laria. La mayoría de los informantes «no interfieren con ellas» y se limitan a preguntar qué hacer; pero se están sucediendo las agresiones, un comportamiento que el presidente de la Cepesma invitó a «no permitir» dando cuenta de ello a su organización «o directamente en el teléfono 062 para ponerse en contacto con la Guardia Civil».

Laria asegura que el temporal trajo otros siete ejemplares al País Vasco y hay dos más en Galicia. Dejar a los animales tranquilos «evita que puedan hacer daño, pues su única forma de protegerse en una poderosa dentición, con fuerza muy superior a un perro», agregó.