Por los montes de Muniellos y La Viliella

Antes de que corten el paso totalmente en todo el entorno de la Reserva Integral de Muniellos, Reserva de la Biosfera, proponemos un fácil paseo por el Monte La Viliella, cerca del pueblo de igual nombre y Larón, donde hace meses apareció una osezna herida (tras un incendio intencionado), al igual que en Villarín y Páramo del Sil.

Siguiendo la carretera AS-15 que atraviesa la capital del concejo de Cangas del Narcea en dirección al puerto de Rañadoiro (ahora con moderno túnel) se puede acceder bien a Degaña, por Fondosvega, aunque antes hay un pueblo afamado, Larón, junto al de La Viliella, que puede ser punto de partida de una caminata por tierras que lindan con la Reserva Integral de Muniellos y Parque Natural de Fuentes del Narcea, Degaña y de Ibias, en el extremo más occidental de los apartados montes de la Sierra de Degaña y Monasterio de Hermo. En realidad la caminata es por las estribaciones de la sierra de Tablado y bosques y Monte La Viliella y Corralín. En esa zona osera se vieron juntos hace unos meses media docena de estos plantígrados, cosa poco usual, aunque esta concentración de osos pardos fue producida por un conato de incendio (provocado como es habitual); y propicio la masiva huida de la fauna silvestre de ese parque natural y de la citada reserva biológica. Muchas señales están tiradas o tapadas, con lo cual los turistas no saben qué hacer. Todo ello es una vergüenza que propiciará (como en los Picos de Europa) la extinción de lobos y osos en plan salvaje. Luego esos lugares serán solo el reino de moscas y mosquitos (o jabalíes).

En estos montes hay abundantes restos de época romana (nada cuidados ni catalogados); como vestigios de puentes y caminos empedrados, con sus contrafuertes, muros o 'llantones'. Téngase en cuenta que los romanos sacaron mucho oro de los montes de Corralín, por eso cuenta el dicho popular: «Corralín, cuenca de oro: tiras una piedra y aparece un tesoro». Esos montes más modernamente pertenecían al Señorio de Quiñones. Ahora el pueblo de Corralín está prácticamente deshabitado, aunque aún van descendientes de antiguos vecinos de Corralín. Su única comunicación con la civilización está en los pueblos de La Viliella (perteneciente al concejo de Cangas del Narcea) y Sisterna y El Bao (del municipio de Ibias); y cercano a Tablado (perteneciente a Degaña, de donde depende también El Corralín).

Una vía que uniese La Viliella y San Antolín de Ibias, iniciada hace más de un siglo, pero inconclusa, con la caja o trazado cruzando el bosque, es el camino que aconsejamos seguir en esta excursión; con posible final en El Corralín (dos horas de marcha a pie, tomando la senda al principio del puente Basancada y siguiendo la orilla derecha del río Ibias); o mejor solo caminar hasta el puente Basancada (cerca de una hora de marcha). Este puente está a algo más de un par de kilómetros de Larón, junto a La Viliella, siguiendo el río Ibias, hacia el Oeste.En esa zona se ven perfectamente los 'cortes' de la minas de oro romanas. Y a los lados del camino los montons de piedras para la inconclusa calzada a San Antolín de Ibias. Del viejo puente Basancada aconsejamos no seguir, pues los carteles, cuando están de pie, lo prohíben, y no dejan llegar ni a Corralín, ni a Sisterna, ni al Bao, ni al Monte Viliella, pudiendo ser multado el intrépido caminante.