Puertas de Vidiago homenajeó ayer con gran esplendor a San Juan Bautista

La localidad llanisca de Puertas de Vidiago celebró ayer su día grande en honor a San Juan Bautista con una jornada repleta de actos: salida del ramo, misa, procesión, bailes regionales, enrame de la fuente del Tornu y subasta de los panes artesanales que eran donativo de la panadería Lofer, de Lledías.

A mediodía los jóvenes del pueblo trasladaban el ramo desde el barrio de Argüenu hasta la iglesia donde se celebró la misa, que fue oficiada por Florentino Hoyos, párroco de Llanes. Tras la eucaristía se formó una concurrida procesión. Abrían la marcha una cruz y dos ciriales y el estandarte de San Juan en manos de Ramón Vallejo. Seguían el sacerdote y las humildes andas de San Juan a hombros de José María Sánchez, Maximo de Cos, Pelayo Cueto y Antonio Tamés. Las primeras notas de asturianía llegaban desde la gaita de Julián Herrero y el tambor que tañía Lorena Borbolla. Ellos abrían paso al artístico ramo de pan artesanal de cuyo traslado se encargaban, por turnos, los jóvenes Iván García, José Luis Pérez, Nicolás Pantín, Guillermo Noriega y Hugo Sánchez. Tras ellos aparecían cerca de medio centenar de niñas y mozas ataviadas de llanisca.

El cortejo recorrió las principales calles y caleyas del pueblo para regresar a la iglesia. Y a primeras horas de la tarde, en la bolera, tenía lugar un selecto festival folclórico en el que los lugareños interpretaron el Xiringüelín, el Xiringüelu, el Quirosanu, el Pericote y las jotas del Cuera y Leitariegos.

Por la tarde se enramó la fuente del Tornu, el manantial que durante siglos calmó la sed y las necesidades domésticas a los vecinos.