Riego alega motivos de seguridad para mantener cerrado el paseo de Candás

El alcalde de Carreño, Ángel Riego, considera que la seguridad de los viandantes y de los conductores es prioritaria tras el argayo que se produjo en el Monte Fuxa y que ha obligado a cerrar el paseo marítimo de Candás. Considera que es comprensible la preocupación de los vecinos, «pero la responsabilidad municipal pasa por no poner en riesgo el tránsito por la fachada marítima mientras que no se solucionen los problemas de desprendimientos». La gestiones que se están llevando a cabo están coordinadas con la Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente. Y es, precisamente, este departamento el que aconseja mantener cerrados los accesos e, incluso, incrementar las medidas para evitar que ninguna persona utilice esta vía, dice Riego.

En cuanto a la retirada de los materiales que cayeron sobre la vivienda de la calle del Astillero, el alcalde admitió problemas para contratar los trabajos. La razón estriba en que las empresas se muestran reticentes por el riesgo que pueden suponer estas labores para la integridad de la casa afectada. No obstante, se mostró confiado en que, finalmente, se pueda solucionar este contratiempo.

El regidor carreñense sostiene que lo primero que hay que hacer es valorar la situación para tomar las decisiones idóneas. Según indicó, se estima que el precio de los trabajos podría rondar los 160.000 euros, aunque precisó que esta cantidad «es solo una referencia, puesto que el cálculo lo ha hecho el arquitecto municipal, que, evidentemente, no es especialista en este tipo de cuestiones». Resta conocer quién se hará cargo del desembolso, dado que las causas del desplome de la ladera obedecen a causas naturales.