El Marino cae ante el Ourense

El Marino de Luanco perdió por la mínima en su visita a Orense (1-0) merced a un solitario gol de Óscar Martínez que dejó los tres puntos en Galicia. Encadena así el equipo de José Luis Quirós su segunda derrota consecutiva.

Fue un primer tiempo de gran igualdad y de poco fútbol por parte de ambos equipos. El terreno de juego condicionaba mucho a ambos y con el paso de los minutos todavía se complicaba más la posibilidad de combinar, sobre todo en el medio campo, algo que querían ambos equipos.

Precisamente el control del medio campo podía ser la clave del choque y ahí los de José Luis Quirós se mostraron superiores. Así, tras unos primeros minutos de fluidez local, los cinco primeros con dos llegadas buenas por las bandas y sendos remates flojos de Óscar Martínez e Iván González, se abrió una etapa de mejor juego del Marino, aunque sin ocasiones claras de gol en las aproximaciones a la meta defendida por Pato.

Sólo en una jugada aislada, tras varios despejes erróneos de la zaga local, Alex Arias intentó sorprender con un disparo desde el punto de penalti, tiro que se fue alto.

La movilidad de Iván González y Oscar Martínez era la mayor amenaza de un Ourense que estaba incómodo y sin control del juego. El Marino, por contra, estaba cómodo y el último cuarto de hora la protagonizó el colegiado con decisiones de difícil explicación. Si comenzó con un listón muy alto para mostrar la primera tarjeta, lo cambió de forma radical y en tres minutos, entre el 40 y el 43, dejó con diez jugadores a ambos equipos.

Raúl fue expulsado tras una entrada en el medio del campo y una mano clara en un salto de cabeza, también en el centro del campo, y acto seguido era el ourensanista Luismi el que se iba a la ducha antes de tiempo por dos entradas sin peligro para el rival, en una decisión de clara compensación.

Pero el colegiado siguió su carrusel de tarjetas incomprensibles con otra a Iván González al sufrir una falta que no vio y por lo que pensó que se tiraba al suelo. Esta actitud del colegiado convirtió los últimos minutos del primer tiempo en protestas de unos y otros y sin juego sobre el terreno de juego.

Tras el descanso parecía que el partido no cambiaba de decoración, pero el Ourense daba más sensación de peligro en cada acción de ataque con más espacios y con la entrada de un extremo más. Adrián Cruz era el jugador más incisivo de un Marino de Luanco que comenzaba a desarmarse en defensa.

Pérdida de balón y gol

Precisamente en una acción de pérdida de balón en el medio campo llegó el que sería el único tanto del partido tras un gran centro de Sanginés que Óscar Martínez, en el segundo remate, transformó en el área pequeña al batir a Diego Santos.

Ahí se acabó la resistencia de un Marino al que le pesaba el terreno de juego y comenzó a cometer errores defensivos de bulto con muchos espacios para que el Ourense pudiese sentenciar en cualquier acción de ataque. Óscar Martínez dispuso de un remate de cabeza en el área pequeña que se marchó fuera por muy poco.

Los locales dispusieron de varias acciones de peligro, pero el bajón del Marino duró poco y pronto los de José Luis Quirós volvieron a hacerse con el control del juego. En el minuto 75 una acción de Adrián Cruz dejó en bandeja el disparo a Álex Arias, pero su remate en el área pequeña no encontró la puerta de Pato.

El último cuarto de hora fue de 'tú a tú', agotando las escasas fuerzas de unos y otros. El Marino echó el resto buscando el tanto del empate en cualquier acción aislada o de balón parado. Adrián Cruz tuvo un disparo desde la frontal que no encontró puerta y el Ourense daba sensación de peligro con el Marino volcado en ataque.

Hasta el último suspiro lo intentó el Marino, que acabó cediendo tres puntos ante el Ourense.