El Marino respira en el tiempo de prolongación

El Marino salvó un punto in extremis en su visita a Alcalá gracias al gol de Cruz en tiempo de prolongación. Un protestado penalti a un cuarto de hora del final, que Rubiato transformó, parecía ser definitivo para que los de Quirós sumaran una derrota. Sin embargo, la inmediata expulsión de Cerrudo empujaron a los asturianos y un disparo potente de Cruz sirvió para empatar y salvar un punto en tierras madrileñas.

El Marino necesitaba volver a la senda de la victoria, esta vez frente al penúltimo. Quirós recuperó a Adrián Cruz de su contractura pero no pudo contar ni con Robert, que sigue escayolado de la mano izquierda, ni con Saavedra, aquejado de fiebre durante la semana.

La defensa de tres alcalaína y el acumular muchos hombres en el centro del campo hicieron que el Marino recurriese a balones en largo para intentar aprovechar la velocidad de Diego García. En el 10, en uno de ellos, Stefan fallaba en el despeje golpeando al propio Diego García y, cuando encaraba a Juancho, Joselu, por bajo, le rebañaba el esférico sin más, aunque el luanqués reclamaba mano y penalti.

Al Alcalá ya ni siquiera le valen los empates y puso toda la artillería. En el 48 hubo un remate de Iván García, a la salida de un córner, que Ponzo detuvo con certeza. El sistema 3-3-4 local daba muchos espacios al Luanco. En el 51, Cuenca remató de cabeza fuera una falta lateral y Blanco de cabeza en un córner puso el uy en la grada.

En el 71, se produjo un penalti dudoso de Daniel Álvarez a Carlos que Rubiato no perdonó. Sin embargo, al minuto, Cerrudo vio la segunda amarilla y dejó al Alcalá con uno menos. El conjunto alcalaíno dio un paso atrás y los de Quirós apretaron. En el descuento, Cruz enganchó un zapatazo que significó el 1-1 final.