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A. HUERGA
Viernes, 11 de enero 2013, 04:49
El Granada ha pagado 20.000 euros que era la cláusula de rescisión de Jona, delantero del Ourense, y lo cederá a un equipo de Primera División portuguesa, en un principio el Vitoria de Guimaraes.
En la categoría de bronce del fútbol nacional hay jugadores con calidad para jugar más arriba, pero el dinero que se puede hacer con la venta de uno no es tanto como pudiera parecer. Que el Granada pagase la cláusula de rescisión es algo circunstancial, pero para el Ourense es un golpe duro, no en vano Jona era su goleador y la referencia del equipo de Luisito en ataque, llevando once goles.
Jona ya había sonado para irse del Ourense poco antes de jugar ante el Avilés, pero en aquella ocasión el propio jugador salió a desmentir la noticia. ¿Se pueden vender jugadores en Segunda División B? Sí. Pero la rentabilidad no es tanta como pudiera parecer y la revaloración con un ascenso es bastante mayor que lo que consigue un club mal vendiendo.
El mercado invernal se está moviendo mucho y así la marcha de Rubiato del Zamora podría acabar con el delantero madrileño en el Alcalá, donde Antonio Acosta está utilizando sus dotes de secretario técnico para confeccionar una plantilla aguerrida y con un juego bastante diferente al que realizaba Pablo López, muy valiente, pero sin demasiados frutos.
El Ourense busca ahora un delantero para reforzarse ante la marcha de su goleador, algo que tendrá complicado, aunque parece que tiene varias negociaciones abiertas.
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