Rescatan un coche robado que fue arrojado al puerto de Luanco

Los vecinos de Luanco comenzaron ayer el año sobresaltados. Desde primera hora de la mañana se desplegó un amplio dispositivo de seguridad formado por Policía Local, Guardia Civil de Gozón, Bomberos de Asturias y Salvamento Marítimo, con su propio helicóptero, para rescatar un coche que, sobre las 8 horas, había caído al puerto del Gayo, en la capital gozoniega.

Durante los primeros momentos, se temió lo peor: que hubiera alguna persona dentro. Efectivos de Bomberos de Asturias, con base en el parque de Avilés, se lanzaron al agua para comprobarlo, pero tiempo después indicaban que, afortunadamente, no había que lamentar víctimas. Ni en el interior del turismo -que había quedado sumergido a seis metros-ni en los alrededores. Estaba vacío.

A partir de entonces, comenzaron las tareas para rescatar el automóvil. Según la Policía Local de Gozón, las labores se prolongaron durante más de tres horas, hasta las 11.30 horas, puesto que las condiciones de la mar «eran muy malas y había mucha oscuridad, apenas se veía». Finalmente, los bomberos engancharon el coche a su autoescalera y lograron subirlo a tierra.

Se trataba de un Ford 'Fiesta' gris que, como se conoció a lo largo de la mañana, había sido robado en Gijón el día antes, Nochevieja, y cuyo propietario es vecino también de la villa de Jovellanos.

Las primeras pesquisas de los cuerpos de seguridad locales se centraron en preguntar a los vecinos de la zona si habían visto algún movimiento sospechoso sobre las ocho de la mañana. Nadie pudo aportar datos, salvo un único testigo, que afirmó haber visto, según fuentes consultadas, «a dos o tres chavales empujar el coche al puerto». No obstante, indicó que los vio «de lejos» y, por tanto, no podía identificarlos.

«Es lamentable»

La Guardia Civil se está encargando de las diligencias para tratar de esclarecer un suceso «intencionado», sus causas y los autores.

El alcalde de Gozón, Ramón Artime, por su parte, que siguió los hechos desde primera hora, manifestó que «es lamentable que ocurran estas cosas». Nunca antes en el municipio había sucedido algo así. No obstante, recordó que «el peor temor de todos era que hubiese alguna persona dentro y, afortunadamente, no fue así y no tenemos que lamentar daños personales».