El concejal de IU David García Leis amenaza al dueño de Ryanair

Una broma, «de mal gusto, pero que hice para un círculo muy reducido de amigos», le ha salido cara al concejal de IU del Ayuntamiento de Corvera, David García Leis. En las redes sociales circula, desde el pasado viernes, una captura de una reclamación que hizo tras quedarse en tierra cuando debía volar a Madrid con la compañía Ryanair, en la que amenaza de muerte al dueño de la compañía, Michael O'Leary.

En una reclamació se dirige a él calificando de «puta rata asquerosa» asegurando que «merece ser ejecutada». No sólo eso, ya que concluye que «espera» que «algún día yo pueda hacerlo con mis propias manos después de haberlo torturado durante días».

Leis mostró su sorpresa ayer por el revuelo generado en los últimos días, y recalcó que «ni tenía intención de presentar la reclamación y fue una broma con mis amigos».

El concejal relató que el pasado viernes se disponía a viajar a Madrid pero no pudo embarcar porque tenía el DNI caducado. «A pesar de presentar mi carnet de conducir, no me dejaron acceder, no conocía su estricta política, pero me lo tomé con toda normalidad y una sonrisa». Tras el incidente «llamé a unos amigos que iban en coche a Madrid, para poder ir con ellos y en tono de comedia decidí escribir esa reclamación», que tras firmarla, «rompí y tiré a la papelera». Ayer admitía que «está fuera de lugar y además cometí el error de colgarla en el Facebook».

Durante el fin de semana accedió a su perfil en esta red social, pero no pudo borrar la fotografía, que sus conocidos seguían comentando, por conectarse siempre desde su móvil. De vuelta en Asturias, tras el fin de semana, accedió de nuevo a su perfil para borrar la captura.

«No representa ni la opinión de IU de Corvera, ni la del área de Juventud, porque es mi cuenta personal», dijo, consciente en todo momento «del error por haberla colgado». Además, aseguró que «no pretendía ser una reivindicación contra Ryanair, sino seguir la broma con un grupo de personas».

Quiso aclarar también que en ningún momento se dirigió a ninguna trabajadora de la compañía, «y no tengo a ninguna en perfil de Facebook». Se refería así a que la captura de su Facebook llegase a los medios de comunicación por la denuncia de una supuesta empleada de Ryanair.