Martes lluvioso y en silencio

La procesión del Silencio acalló ayer el centro de la ciudad a la par que miraba al cielo en una jornada protagonizada por una intermitente lluvia. A su paso, no se oía casi ni un ruido. Los cofrades que desafiaron al agua lograron salir con los tres pasos (Virgen de la Amargura, Santo Cristo Flagelado y Santa Cruz) de Santa María la Real de La Corte, tras retrasar media hora la procesión.

Una de las principales novedades (aparte del cambio pensado inicialmente para el recorrido) y uno de los momentos más significativos fue un Acto de Fe, que tuvo lugar poco después de que los cofrades sacaran a la Virgen y el resto de imágenes de la parroquia de La Corte.

A los cofrades, vestidos con hábitos blancos y negros, les acompañaron mujeres vestidas con mantilla y un numeroso público que se acercó a ver a una de las hermandades más veteranas de la Semana Santa ovetense. Refundada en 2001, fue la única cofradía que participó en la procesión del Santo Entierro concluida la guerra civil en el año 1941.