Cazadores y pescadores se alían en Coaña

Cerca de un centenar de personas participaron ayer en el Día de la Caza y la Pesca de Coaña, una iniciativa con la que el Ayuntamiento trata de dar visibilidad a las más de veinte cuadrillas que cazan en los ocho cotos de la comarca del Parque Histórico del Navia y a los centenares de pescadores que disfrutan de su afición en las aguas del Navia.

En la que fue la primera edición de esta jornada, el Ayuntamiento coañés rindió homenaje a los 25 miembros de la cuadrilla de cazadores de Ponticiella, del concejo de Villayón, que con 62 piezas logró la mejor marca en la última temporada. Asimismo, se distinguió a José Antonio Sánchez, vecino de Villacondide, que en 2009, antes de la veda impuesta los dos últimos años, echó a tierra el campano del Navia.

Tanto Sánchez como el portavoz de la cuadrilla de caza, Mario Méndez, aplaudieron la iniciativa del Consistorio de Coaña. En especial, los cazadores, que siguen sintiéndose «incomprendidos» por la sociedad. Sin embargo, los aficionados sostienen que contribuyen a la economía de las zonas rurales, ya que posibilitan la continuidad de negocios como bares y restaurantes.

Además, «a las administraciones nos beneficia que los cotos estén activos porque, de lo contrario, en caso de accidente, los daños tendríamos que asumirlos nosotros», anotó la teniente alcalde coañesa, Rosana González, quien destacó que la caza y la pesca «son los deportes más arraigados en la comarca y los que más gente mueven».

El carácter festivo de la jornada no evitó las demandas a las administraciones públicas. Así, Méndez hizo un llamamiento para reducir la población de lobos, cuyo crecimiento ha hecho disminuir de forma notable las especies cinegéticas: «Creo que debía dejarse a las sociedades de cazadores controlar la población de lobos para que haya un equilibrio razonable», expuso el portavoz de la cuadrilla de Ponticiella, quien recalcó que «ningún cazador es partidario de exterminar ninguna especie».

Su postura fue respaldada por el alcalde de Villayón, Ramón Rodríguez, que afirmó que el lobo «está perjudicando totalmente al concejo», ya que también se han contado daños en las ganaderías de la zona: «Hay que reducir la población de lobos de la forma que sea», reclamó.

Por su parte, José Antonio Sánchez, que en 1990 recibió el Salmón de Oro de Asturias, lamentó que la pesca en el Navia tenga un difícil presente y un peor futuro: «No se repuebla, ni con alevines de trucha ni de salmón, desde hace más de 30 años», señaló. Por eso, instó a las administraciones a recuperar la población de salmónidos de la cuenca y a crear escalas que permitan su paso por un cauce «que se conoce como la ruta del kilovatio», en relación a las centrales que aprovechan la fuerza del agua para producir energía. Además, solicitó mejoras en los accesos y la limpieza de la ribera.