Juanele reencuentra el gol en la cárcel

Una mala jugada puso hace un mes a Juan Castaño Quirós, Juanele, tras las rejas de la prisión de Villabona, donde ahora responde haciendo lo que mejor sabe: darle al balón. El 'Pichón de Roces' debutó el pasado sábado en la I Liga de Fútbol Aficionado por la Inserción defendiendo la elástica de los internos.

El dos veces campeón de la Copa del Rey se enfrentó en esta ocasión a la Cooperativa Avilesina de Transportes, cuyos integrantes asistieron al encuentro tras celebrar la tradicional comida de empresa por Navidad. No parece que fuera ésta la mejor manera de preparar el partido habida cuenta de lo abultado del marcador final: 24-0 para la escuadra de los presos, todos ellos procedentes del primer módulo de la Unidad Terapéutica y Educacional (UTE). Los goleadores fueron Hansa (5), Malaguita (4), Yoni (4), Ordóñez (4), Berto (3), Kike (2), Hugo (1) y finalmente Juanele (1).

De dirigir al equipo vencedor se encargó un profesor que colabora habitualmente con el centro penitenciario. Aunque son conocidos sus episodios de indisciplina con entrenadores como Javier Clemente, en esta ocasión el gijonés aceptó renunciar a su posición natural cerca de la portería enemiga y jugó como mediocentro encargado de darle fluidez el juego. «Ordenaba a sus compañeros cómo moverse y demostró que el que tuvo, retuvo», indica Maxi González Asprón, promotor del campeonato. «Se le vieron destellos de calidad muy buenos», abunda.

Tras hartarse de asistir a sus compañeros, Juanele quiso participar del festín goleador anotando un tanto. Al término del encuentro, sonriente, bromeó con la posibilidad de que un resultado de semejante magnitud les valiera a los internos un permiso por parte de la dirección del centro penitenciario. «Hombre, una cervecita y un poco de jamón no venían mal», opuso el ex del Sporting.

La presencia de Juanele en Villabona está alegrando la rutina penitenciaria y son varios los reclusos que, tras reconocerle, le han buscado para que les firme camisetas del Sporting. Desde el principio los servicios de clasificación del centro entendieron que el mejor lugar para un interno como el exfutbolista estaba en los módulos de la UTE, donde se intenta que los reclusos aprovechen el tiempo participando en talleres formativos. Cada semana, los internos disputan dos o tres pachangas en el campo de fútbol abierto y situado en el centro de la cárcel. El encuentro contra la Cooperativa Avilesina de Transportes hubo sin embargo de trasladarse al polideportivo de la penitenciaría por culpa del mal tiempo.

Durante 90 minutos, Juanele revivió ahí los laureles del pasado y pudo olvidar los sucesos que le han llevado hasta Villabona. Contra el de Roces se dictó en 2009 una condena de seis meses de cárcel por un delito de lesiones tras una trifulca en un pub de Gijón. La pena quedó en suspenso con la promesa de no volver a delinquir en los dos años siguientes. Sin embargo luego le llegaría otra sentencia del Juzgado de Violencia de Género de Gijón, que, al no ser recurrida, derivó en una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión. La familia del exfutbolista explicó hace unos días que todo respondía a una posible negligencia de su abogado y anunciaban un recurso para excarcelarle.

Mientras no llegue una decisión sobre el asunto, el calendario de esta particular Liga reserva al ex del Sporting, Tenerife y Zaragoza nuevos partidos contra los equipos de Radio Taxi Villa del Adelantado, Bar Querétaro de Piedras Blancas y los Veteranos del Raíces Fútbol Sala. En principio, Juanele está asignado a la escuadra de la UTE-1, aunque no se descartan traspasos ocasionales para que refuerce a los otros dos conjuntos de presos.