Otro reto para el Gijón Jovellanos

Otro reto para el invicto Gijón Jovellanos. Nadie contaba con su victoria en Puente Genil ni luego en la cancha del Teucro, pero tampoco que remontara ante un equipo como el Cangas, si bien una jornada antes empataba en Santander.

Por todo ello, el equipo gijonés, que disfrutó esta semana de su puesto de ascenso directo a la Liga Asobal, afronta con gran moral hoy ante el Bidasoa (19.15 horas, La Arena) un duelo que puede marcar sus aspiraciones esta temporada en la División de Honor Plata masculina.

El rival de esta tarde es otro histórico de la Liga Asobal, que fue campeón de Europa en 1995, por lo que se trata de un club que pretende regresar a la élite. Así las cosas, la tarea para el Gijón Jovellanos no será fácil, porque los irundarras vienen además de ganar al Adelma Sinfín, que aterrizó imbatido la jornada anterior al mítico Artaleku.

Los puntos claves del Bidasoa están en la portería, donde destaca el veterano meta Asier Zuviría, que jugó en la élite con el Valladolid, y el francés Astydamas. A ellos se suman el extremo diestro Asier Aramburu, el pivote Aldunate y lateral galo Leo Renaud.

El técnico Alberto Suárez es consciente de que «ganar al Bidasoa será más que complicado, porque tiene jugadores veteranos con oficio y es un equipo clásico del balonmano español, con mucho peso en todos los aspectos». Pero el entrenador gijonés advierte que «vienen de acabar con la imbatibilidad del Adelma y es un equipo que cuenta para la zona alta de la tabla con vistas al ascenso».

Una olla a presión

Si el Pabellón de La Arena registró en la jornada anterior su mejor entrada, el emblemático recinto gijonés puede estar hoy a tope «porque no hay fútbol y seguro que la afición apoyará como el sábado pasado ante el Cangas o incluso puede haber más gente».

En este sentido, Alberto Suárez tiene bastante claro que «si la cancha es una olla a presión, las posibilidades de ganar serán aún mayores», aunque el preparador es optimista «porque mis jugadores están con la moral a tope, ya que estamos en ascenso directo, y creo que esto ayuda mucho».

Ante todas estas positivas circunstancias, el partido de esta tarde promete ser un duelo de gran altura, en el que habrá balonmano de alta escuela, algo que no se veía en Gijón desde los tiempos en que el Grupo optó a dar el salto a la élite en dos ocasiones.