Detenido por agredir brutalmente a un taxista al que no quiso pagar

Se subió al taxi, pidió que le llevase a una calle de Moreda y al acabar la carrera agredió de forma brutal al conductor, al que además no había querido pagar el servicio. Un joven fue detenido por el Cuerpo Nacional de Policía en la madrugada del sábado por mandar al hospital en estado grave a un taxista. El herido, un hombre de unos cincuenta años y con media vida en el taxi, fue socorrido en un primer momento por los compañeros después de que él mismo pudiese accionar la alarma del vehículo que conecta directamente con la centralita de la cooperativa de Radio Taxi Villa de Jovellanos.

Los hechos ocurrieron sobre las cinco de la mañana del sábado. El taxista recogió al joven, que se sentó en el asiento del copiloto y pidió que le llevase hasta la calle de las Cortes de Cádiz. Después de pocos minutos de trayecto y al llegar al destino, el individuo intentó bajarse del vehículo sin abonar lo que debía.

Los problemas llegaron cuando el taxista le recriminó su actitud y le pidió que le diese el dinero que le debía. De pronto el individuo comenzó a pegarle puñetazos en la cara al conductor y a golpearle violentamente contra el volante. La víctima pudo en un momento determinado accionar el botón de alarma para alertar a la centralita de que se encontraba en una situación de emergencia. Fue esa acción la que le salvó la vida ante el desmesurado ataque por parte del cliente.

En apenas dos minutos se personaron en la calle de Moreda todos los taxistas que se encontraban de servicio por la zona. Los compañeros del lesionado pudieron retener al individuo hasta la llegada de la Policía. Se da la circunstancia de que la agresión tuvo lugar cerca de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía.

El taxista presentaba graves lesiones en la cara y en la cabeza y se encontraba notablemente conmocionado por lo ocurrido. Fue trasladado por los efectivos sanitarios de urgencia al Hospital de Jove. Entretanto, los compañeros se hicieron cargo del taxi, cuyo interior presentaba abundantes restos de sangre de su compañero, que fueron limpiados por éstos sobre la marcha.

Estado de agitación

El agresor, por su parte, fue detenido y llevado a los calabozos de las dependencias policiales a la espera de pasar a disposición judicial. Según explicaron fuentes próximas a la investigación, estaba bajo un gran estado de agitación.

Desde el gremio de taxistas llevan años denunciando el estado de inseguridad en el que se encuentran, totalmente expuestos a los clientes. Pese a los últimos dispositivos instalados en los vehículos, las mamparas y el botón del pánico activado por el último taxista agredido, son lamentablemente frecuentes este tipo de episodios.

Además, aún permanece en la memoria de todos el crimen en abril de 2010 de uno de sus compañeros de 37 años en Arriondas, cuyo presunto asesino fue localizado meses después en Suiza.