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PPLL
Martes, 12 de julio 2011, 10:18
El Real Avilés ya tiene a su fichaje estrella. Después de varias semanas de negociación, Juan Díaz dio a última hora de la noche de ayer el sí a la propuesta del club blanquiazul y se ha comprometido paras las dos próximas temporadas, en las que será la referencia del equipo de Ricardo Bango en el eje del campo, la línea media.
La llegada de un jugador con la experiencia y la trayectoria de Juan, que fue capitán del Sporting muchos años en Segunda División y que estuvo una temporada en la máxima categoría con el Nástic de Tarragona, supone un gran golpe de efecto para el nuevo proyecto que se ha dibujado en el club blanquiazul y sus nuevos gestores.
El del futbolista de Pervera, Carreño, era la prioridad y desde ayer ya se puede afirmar que vestirá la elástica del equipo blanquiazul tras una negociación que estaba desde el principio bien encaminada y que se ha demorado hasta que Juan ha resuelto unos temas personales que le ataban a Madrid, donde jugó la pasada campaña, en el Alcalá. Su regreso a Asturias le puso a tiro del Real Avilés, que hace un esfuerzo económico importante para hacerse con un futbolista se rendimiento y que imprimirá al equipo avilesino el carácter y la calidad necesarias en la línea medular. Juan llegará el próximo lunes, a tiempo de iniciar la pretemporada y de ser presentado a los medios de comunicación.
Tras comprometerse, Juan hizo una primera valoración de su fichaje a LA VOZ: «El Real Avilés tiene detrás mucha historia y es el tercer club de Asturias. Los últimos años no han sido buenos, pero esta temporada se ha puesto en marcha un proyecto que me parece muy ilusionante y quiero participar». Asume que su papel será fundamental en un equipo de Tercera División, aunque se trata de un jugador de equipo que huye de los protagonismos individuales: «El objetivo de este club es el ascenso a Segunda B y me han dicho que quieren lograrlo en un plazo máximo de dos años, aunque yo espero que lo consigamos a la primera».
Juan Díaz pasó el grueso de su carrera deportiva en el Sporting, a cuyo primer equipo llegó desde el filial y en el que estuvo seis temporadas, las últimas cinco con el brazalete de capitán. Salió del club rojiblanco rumbo a la máxima categoría de la mano del Nástic, con el que fue titular más de treinta partidos.
El descenso del conjunto catalán llevó al asturiano al Poli Ejido, en Segunda División, para militar posteriormente en equipos de Segunda B como el Montañeros o el Alcalá, en el que estuvo hasta el final de la pasada campaña. Los dos próximos ejercicios vestirá de blanquiazul en el Real Avilés, en el que lucirá su dorsal preferido, el 8, con el que ha jugado en la mayoría de equipos.
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