Denuncia a su consuegra, amante de su marido, por tirarle una taza a la cabeza

Malos tiempos para la familia. Una vecina de la calle Mon de 59 años ha denunciado a la amante de su marido por una supuesta agresión motivada por los celos. La cosa no se queda ahí. A la víctima y a la presunta agresora les une además un fuerte vínculo: son consuegras. El hijo de la denunciante y la hija de la acusada son pareja y tienen a su vez un hijo, es decir, el nieto de ambas implicadas. Un enredo real que parece de ficción.

Los hechos están siendo investigados por el juzgado de Instrucción número 1. Ocurrieron, según la demandante, M. C. H. V., en una finca próxima al cementerio de Ceares. Se encontraba con su marido y con la novia de éste cuando se enzarzaron en una violenta discusión motivada por los celos.

En un momento dado, D. P. F., natural de Cantabria, le tiró una taza que tenía en la mano. El objeto le impactó directamente en la cara, provocándole una profunda brecha a la altura de la ceja derecha y por la que sangraba de forma abundante.

Al centro de salud

La herida pidió ayuda en la carretera y, según ella misma relató en la Comisaría, un conductor la trasladó en su vehículo hasta la comisaría de la Policía Local y desde allí al centro de salud de El Natahoyo. La mujer fue curada de sus heridas y posteriormente acudió a la Comisaría para interponer la denuncia.

Pese a que en un primer momento aseguró que había sido agredida por su marido y por su compañera sentimental, más tarde cambió la versión y manifestó que la autora de los golpes y la que lanzó la taza fue la amante, o lo que es lo mismo, su consuegra.