Montserrat declara que compró en Gijón el arma con la que mató a Isabel Carrasco

Montserrat González, autora confesa del crimen de Isabel Carrasco que se sigue este lunes en la Audiencia Provincial de León, declaró ante el jurado popular que compró el arma homicida en el bar Armando, en Gijón, que conoció después de preguntar a una mujer en un mercadillo. Fue al establecimiento de La Calzada «con una amiga» para encargar el revólver. Regresó sola dos días después, aseguró haber pagado 2.000 euros y según su versión, el hostelero le regaló otra pistola, una navaja y le llevó a «las afueras de Gijón a probar las pistolas».

Su versión no puede ser corroborada por Armando, ya que falleció hace dos años. La acusación apuntó durante la instrucción que la Montserrat pudo buscar esa coartada después del fallecimiento de Armando que, tal y como publicó EL COMERCIO, falleció en enero de 2013.

De esta forma, Montserrat González ha mantenido ante el jurado su versión de que ella es la autora del asesinato de la presidenta de la Diputación de León. De hecho, según su declaración, decidió acabar con la con la vida de la dirigente del PP cuando constató que iba a seguir en ese cargo, porque el presidente del partido, Mariano Rajoy, no accedió a que la sustituyera Javier García Prieto.

González lo ha confesado en el juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de León por ese crimen y ha dicho que, cuando Rajoy se negó a que García Prieto sustituyera a Carrasco, tomó la decisión.

Y lo hizo porque estaba convencida de que la víctima iba a seguir haciéndole «la vida imposible» a su primogénita.

«Decidí que la iba a matar», ha recalcado Montserrat González, quien ha roto en llanto en algún momento de su declaración, como cuando ha reconocido que su hija sufría depresiones y que se fue a vivir con ella prácticamente toda la semana, porque no quería que le pasara como a una amiga de Gijón y a otros conocidos, que se suicidaron.