La oposición y Cubera aseguran que aumentar la altura de los pisos de La Barquerina es ilegal

El pretendido aumento de alturas de edificación en el plan especial de La Barquerina comienza a levantar ampollas en algunos sectores de la sociedad maliaya. Hasta ahora, las únicas críticas a la operación provenían de URAS, pero ayer el PSOE y la Asociación de Amigos del Paisaje Cubera mostraron su oposición a la medida por considerarla «ilegal» y contraria a la normativa urbanística.

El PSOE, de hecho, solicitó la convocatoria de un Pleno extraordinario para tratar esta cuestión. En dicha sesión, los socialistas pretenden «que se rectifique, dejando sin efecto el acuerdo de la Junta de Gobierno del 14 de febrero de 2007, por el que se aprobó inicialmente el estudio de detalle».

Para los socialistas, el estudio, en el que se propone el aumento de una y dos alturas en diferentes zonas de La Barquerina, «vulnera de manera flagrante las normas urbanísticas vigentes en relación con las alturas previstas».

El portavoz socialista, Pedro Castro, recordó además que la operación debería realizarse a través de una modificación del plan de La Barquerina y no por medio de un estudio de detalle. A su juicio, «se demuestra la complicidad de la Junta de Gobierno con los promotores, generando una alarma y un recelo lógico en la ciudadanía».

Cubera, por su parte, presentará alegaciones, dado que la propuesta aún está sometida a información pública. Su presidente, Etelvino González, fue tajante: «Es una operación ilegal porque va contra la norma».

Estos pronunciamientos son, para Xicu Díaz, concejal de URAS, «la demostración de que no se trata sólo de una denuncia de nuestro partido, sino que es algo grave que preocupa a la ciudadanía».

El plan especial de La Barquerina establece, dependiendo de la zona, un máximo de tres y cuatro alturas más bajocubierta. Se permiten cinco únicamente en la zona adyacente a la carretera de Oviedo. La modificación fue solicitada por Sogepsa en el estudio de detalle y plantea añadir una o dos plantas en diferentes puntos. Para que sea válida, debe ser aprobada por el Pleno.

En el mismo entorno de La Barquerina, ayer una pala excavadora convirtió la casa de La Huertona en un montón de escombros en poco más de una hora.

El derribo del inmueble, fechado en el siglo XIX, estaba previsto en el proyecto de urbanización del área y había despertado cierta oposición vecinal en las últimas semanas.