El exasesor fiscal guardaba numerosa documentación de Villa y Postigo en su despacho

Cuando José Antonio Postigo acudió en 2012 al despacho de José Manuel Fernández para resolver un encontronazo con Hacienda, el exasesor fiscal del Montepío de la Minería cuenta que desconocía la situación económica de Postigo y de su familia. Que no sabía el estado de sus cuentas, ni tenía información sobre su patrimonio. Tampoco de José Ángel Fernández Villa y de su entorno familiar. Aclara que en su despacho se limitaban a redactar los contratos que le encargaban desde el Montepío de la Minería y que por su trabajo en la residencia de Felechosa además del sueldo anual que ya percibía. Sin embargo, el resultado del registro de la Guardia Civil echa al traste parte de su declaración ante los Fiscales Anticorrupción y la jueza.

El 30 de mayo entraron en su despacho. Llegaron sobre las once de la mañana. Encontraron cientos de folios y documentación en diferentes carpetas. En una de ellas aparece el nombre de José Antonio Postigo con amplia documentación «relativa a todo»; otros trece folios sobre asuntos bancarios del expresidente; el resguardo de un fax enviado en el que aparece 'Residencia de Felechosa' y en notas y comentarios se puede leer «ya me darás opinión sobre el 'trabajito'»; un dossier con el anteproyecto del geriátrico, documentación sobre comunicaciones entre el Montepío y su empresa, así como una balda exclusiva con información relativa a la herencia de Ludivina Villa Menéndez y notas de comprobación del impuesto de sucesiones.

Toda la documentación está en manos de la Guardia Civil. Los 28.000 euros en fajos de billetes de 50, encontrados en casa de Villa metidos en una caja roja, ya están ingresados en la cuenta de Depósitos y Consignaciones Judiciales del banco Santander.