Orviz acepta reunirse con el partido moradoy abordar también «las anomalías» de Gijón

No todo es un camino de rosas en la confluencia entre IU y Podemos. El coordinador general de IU Asturias, Manuel González Orviz, emplazó ayer a la formación morada a reunirse «mañana mismo» para avanzar en el proceso de confluencia, pero también apuntó que en ese encuentro habrá que «abordar las anomalías democráticas», como «la situación del Ayuntamiento de Gijón. «Si nos preocupan los problemas de la gente -añadió Orviz-, vamos a empezar por resolver los problemas de Gijón y de Asturias».

Orviz, con todo, es un defensor de la confluencia entre ambas formaciones, lejos de los postulados del portavoz de IU en la Junta General, Gaspar Llamazares, quien ayer anunció que él votará 'no' en la consulta que hoy se desarrollará en ambas formaciones sobre el acuerdo sellado ayer por los líderes nacionales. Llamazares señaló a Efe que no está conforme «en lo fundamental» con el preacuerdo y quiere ver, analizando los detalles, «dónde se esconde el diablo». Llamazares, muy crítico con la coalición con Podemos desde que esta fórmula se planteó ya en las elecciones de diciembre, ve «mal» este principio de acuerdo al pronosticar que será perjudicial para la organización. Izquierda Abierta, el partido que lidera Llamazares dentro de IU, lleva meses criticando esta posible alianza con el convencimiento de que su formación, que ha cumplido treinta años de trayectoria, acabará diluida en Podemos y se convertirá en su satélite.

Los roces, además, han sido continuos entre Llamazares y los representantes de Podemos, muy en particular con su secretario general en Asturias, Daniel Ripa, al que ayer por la mañana Llamazares le indicó desde la Junta General que él no necesita «ni calumnias ni elogios», achacando a Ripa una cierta «ciclotimia» y abogando por tener, entre ambas formaciones, «unas relaciones normalizadas, y ahorrarnos las calumnias de un día y los elogios de otro».