«Seguiré trabajando desde la oposición»

El portavoz del PP, Gerardo Antuña Peñalosa, llegó a ocupar su sitio en el estrado, pero la confusión era tal en ese momento que Agustín Iglesias Caunedo se levantó y tomó su lugar para «que sepamos qué es lo que está pasando». Si el candidato del PP no lo sabía era porque las fuerzas que ayer auparon al socialista Wenceslao López como alcalde no comenzaron con buen pie su andadura en común. El portavoz de IU Roberto Sánchez Ramos anunció «un acuerdo de las tres fuerzas» de progreso «para respaldar a Wenceslao López». Después este agradeció «la generosidad de Somos» por cederle el paso en favor del cambio pese a haber logrado más votos que los socialistas. Solo que, cuando tomó la palabra la líder de Somos Oviedo, no quedó tan claro. Ana Taboada anunció que presentaba su candidatura a alcaldesa, generando un enorme desconcierto.

Caunedo fue víctima de él, pero salió airoso. Recordó que, durante la campaña electoral, ya había advertido que existían dos opciones o votar el PP o apoyar a «un tripartito de la revancha». También que su candidatura fue, con mucho, la más votada, con 37.000 apoyos y, además, mejorando los resultados que obtuvo su predecesor Gabino de Lorenzo en 2011. Confirmó, pese a las dudas de esos momentos, que seguirá en el Ayuntamiento al servicio de los ovetenses «tanto si dentro de unos minutos soy alcalde o voy a la oposición».

Caunedo insistió en que, durante su mandato como alcalde, «se ha respetado a la oposición, se ha dialogado y pactado con todos», siempre en beneficio de Oviedo, «generando nuevos derechos sociales, ampliando la cobertura de las becas de comedor» y atendiendo las necesidades de la ciudad y «escuchando a sus vecinos». Fue un discurso breve, como anunció, e inesperado, porque era el turno de Antuña. El que traía preparado por si lograba la investidura quedó en el bolsillo. No era, según fuentes próximas, una alocución vibrante como la de 2012 cuando prometió revolucionar el 'modelo Oviedo'. Caunedo era muy consciente de que las dificultades de liderar un Ayuntamiento frente a una mayoría de 14 concejales, los que suman Somos, PSOE e IU, a la que parecía que solo había frenado, y a la fuerza y a última hora, la dirección de la FSA.

Caras de decepción

La elección de Wenceslao López, con suspense hasta el final, llenó de caras largas las filas de los concejales populares. De incredulidad tras perder el gobierno de la ciudad después de 24 años, salpicados con algunas mayorías absolutas históricas y parece que irrepetibles. Caras de decepción y de dudas, pero también mensajes de ánimo. El primero en reafirmar su compromiso con el proyecto de Agustín Iglesias Caunedo, fue Francisco Javier García, 'Chisco', pero entre todos los fichajes y caras de la candidatura popular habrá bajas a corto plazo.