La Feria de Exposiciones y Comercio de La Corredoria aspira a doblar los puestos

Tiempo. Eso es lo que les ha faltado a la Asociación de Comercio de La Corredoria (Comcor) para haber cerrado una primera Feria de Exposiciones y Comercio redonda. Ya con la vista puesta en la edición del próximo año, dice su presidenta, Charo Álvarez, que «de todo se aprende».

Algunos de los puestos han facturado más de 3.000 euros en los tres días de la feria, «pero nos hubiera gustado que fueran muchos más los negocios presentes». Este año participaron 49 y el objetivo para 2015 es que esa cifra se doble. «Está claro que no llegamos a más gente porque se organizó todo con muy poco tiempo. Es seguro que el próximo año repetiremos y empezaremos a organizar la feria en febrero con un presupuesto en exclusiva», expresó.

También planean ya que la variedad de comercios sea mucho más amplia incluyendo puestos de artesanía, «porque el objetivo es que la gente nos conozca, que sepa donde estamos», explica la presidenta de Comcor. El problema de La Corredoria, razona, es la amplitud del barrio y también la concepción del mismo, «que nació como un barrio residencial. Hay vecinos que nunca han pasado por algunas calles del barrio y por lo tanto no conocen los comercios que allí se ubican. Una ciudad sin comercio es una ciudad triste y por eso queremos acercar los negocios de La Corredoria a quienes viven aquí», incide.

Y otra de las aclaraciones que espera se solucionen el próximo año es el espíritu de la feria: «Esto no es un rastrillo ni una feria del stock», subraya Álvarez.