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IDOYA REY
Jueves, 24 de julio 2014, 00:15
Los dos menores que el pasado 14 de junio fueron denunciados por la dirección del centro de acogida Materno Infantil tras amenazar a los cuidadores y causar destrozos en las instalaciones permanecen ingresados lejos del equipamiento del parque de Invierno. Uno de los chicos que suma 13 años, menor de edad penal, fue puesto a disposición de la Consejería de Bienestar Social que lo trasladó a un centro con más medidas de control. El otro, un joven de 17 años, fue detenido e ingresado en el centro de menores de Sograndio tras huir a casa de su madre, quien le llevó hasta la Fiscalía de Menores.
El incidente se produjo desde primera hora de la mañana, cuando los chicos comenzaron a «dar patadas a las puertas de las habitaciones, produciendo daños en las mismas, forzaron cerraduras y rompieron macetas y plantas». Cuando los educadores del Materno intentaron calmarles, los menores les escupieron, insultaron, amenazaron e intentaron agredirles.
Tras el almuerzo, volvieron a las andadas y luego abandonaron el centro. En la calle no abandonaron su actitud violenta. Según explicaron fuentes policiales, tiraron de un banco a una anciana, que sufrió daños en una cadera ,y se dedicaron a rayar coches aparcados en la zona. Los ciudadanos alertaron a la Policía Nacional, que les llevó de regreso al Materno.
Por la noche volvieron a tirar mesitas por la ventana, rompieron persianas, barras de los armarios y cristales. Arrojaron al vacío mobiliario, dañando a los coches aparcados a las afueras del centro. Luego se fueron. Durante esa noche la dirección del centro presentó la denuncia y por eso el más pequeño de los jóvenes fue trasladado a un centro con mayores medidas de seguridad.
El otro menor se escapó e intentó refugiarse en casa de su madre, quien lo trasladó hasta la Fiscalía de Menores. El chico de 17 años tenía otras causas anteriores, por eso el fiscal coordinador de menores, tras analizar su situación, ordenó el arresto y su internamiento terapéutico en el Centro de Menores de Sograndio durante seis meses. El Ministerio Público analiza indicios de los posibles delitos de atentado por amenazas a funcionarios y por lo daños en los materiales. En su caso abrirá el expediente correspondiente al menor.
Los dos jóvenes llevan poco tiempo en el Materno, donde desde el 1 de julio ya no ingresan extranjeros no acompañados. El centro atiende ahora a asturianos o hijos de extranjeros con residencia en la región. Según sostiene el fiscal coordinador de Menores, Jorge Fernández Capdevilla, las cosas están ahora tranquilas. Calificó este incidente como un hecho aislado.
Por su parte, el portavoz del Gobierno regional, Guillermo Martínez, aseguró ayer que se va a «extremar la vigilancia, los controles y la seguridad» en el Centro Materno Infantil de Oviedo para evitar episodios de violencia y amenazas. «Se va a extremar la vigilancia que haga compatible la seguridad de los trabajadores con el resto de usurarios del servicio», se comprometió ayer Martínez, tras salir a la luz el incidente del pasado junio.
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