Una fuga obliga al cierre del centro de salud de El Cristo y al desvío de pacientes a La Ería

Con la entrada acordonada y el acceso prohibido se encontraron ayer los más de 650 pacientes citados para pasar consulta en el centro de salud de El Cristo. Tras el fin de semana sin servicio, el personal que entró a las ocho menos cuarto de la mañana detectó una fuga de agua que provocó la caída de escayola del techo y anegó la zona administrativa, despachos y hasta el almacén. La inundación lo dejó inoperativo durante la mañana, obligando a posponer las consultas y a atender las urgentes en La Ería.

La rápida reparación de la avería en el sistema de climatización y el achique de agua ya permitieron abrir en la tarde de ayer el punto de atención urgente, cuando continuaban los trabajos en otras zonas, y hoy el centro de salud recuperará la normalidad, según informaron Beatriz López y Marta Huerta, subdirectoras de Medicina y Enfermería del área IV, respectivamente. Ambas, junto con el resto de la plantilla, coordinaron y colaboraron para restablecer la normalidad e informaron a los usuarios en la entrada del incidente. Destacaron «la comprensión de la población» a pesar de las molestias ocasionadas.

Puesto avanzado

Como medida provisional, aquellos que necesitaban atención en la jornada de ayer se desviaron al puesto avanzado con dos médicos de familia, un pediatra, dos enfermeras y un auxiliar administrativo en La Ería. También se alertó al servicio de emergencias 112 de que desviase a otras zonas las posibles consultas.

La inoperatividad del edificio afectó a 600 adultos de Medicina y Enfermería, 40 niños y 18 pacientes de Odontología, que en algún caso también fueron desviados. Trabajan en dicho centro un equipo de 10 médicos de Familia, tres pediatras, nueve enfermeras, un odontólogo, un higienista, un auxiliar de clínica, uno de enfermería y media docena en Administración.

Según informó el personal del centro, lo más probable es que la fuga comenzase el domingo, por el estado en que se encontraron las instalaciones. Por fortuna, al permanecer cerrado durante el fin de semana -las urgencias en el área IV se concentran en otros cuatro puntos-, no se produjeron daños personales y el agua no afectó al mobiliario ni ocasionó, lo que hubiera acarreado males mayores, la caída del sistema eléctrico. Los operarios se limitaron a reparar la fuga, instalar nuevas placas en el techo y limpiar.

Casualmente, esta suspensión temporal de la atención en el centro de El Cristo coincidió con el progresivo traslado del cercano Hospital Universitario Central de El Cristo.