Prisión comunicada y sin fianza para el acusado del atropello mortal a Juan Fombona

Conmoción entre los familiares y allegados de Juan Fombona. La Policía detuvo ayer por la tarde a su mejor amigo, Álvaro A. S., como supuesto autor del atropello que le causó la muerte la madrugada del sábado en Somió. El arrestado, según ha pedido saber este periódico, no reconoce los hechos que se le imputan. Pasó esta mañana a disposición judicial.

El Juzgado de Instrucción nº 5 de Gijón, en funciones de guardia, ha aceptado la petición de la Fiscalía y ha decretado el ingreso en prisión comunicada y sin fianza para Álvaro A. S. Una decisión que se apoya en la «existencia de riesgo de fuga, la gravedad de los hechos que se le atribuyen y la falta de colaboración del detenido, que se acogió a su derecho a no declarar». Al detenido se le atribuye un delito contra la seguridad vial por conducción bajo el efecto de bebidas alcohólicas y un delito de homicidio por imprudencia grave y otro por omisión de socorro.

Álvaro A. S. no acudió ayer al funeral para despedir a su íntimo amigo. Según su entorno se encontraba muy afectado para darle el último adiós al que había sido su íntimo amigo desde la infancia. Fue detenido a primera hora de la tarde de ayer en su casa, también en la parroquia de Somió.

La investigación corrió a cargo de la Policía Local y la Policía Nacional. Todo apunta a que no se trata de una acción intencionada, si bien el ahora detenido se fugó dejando a la víctima con graves lesiones que le causaron la muerte. Según informó la Policía Nacional, desde el mismo momento del atropello, se intentó «conocer el recorrido y las personas» que estuvieron con la víctima horas antes del accidente. Después, con testimonios de testigos y el «cotejo de los vestigios hallados en el lugar», se determinó que el vehículo implicado en el atropello era un BMW. «Desde el primer momento los investigadores se centraron en A. A. S., amigo del fallecido, con el que estuvo cenando y tomando copas en un pub próximo al atropello», señala el comunicado policial.

Los amigos aún están asimilando la noticia. «Siempre estaban juntos, eran íntimos amigos, no acabamos de creérnoslo», lamenta su entorno. Ambos habían salido juntos el viernes a cenar y acabaron, como era habitual, tomando la última copa en el entorno de los pub Baffy y Güito.