Fallece el artista Rodolfo Pico en su estudio

Miembro de la generación más prolífica del arte asturiano, el pintor Rodolfo Pico, nacido en Trevías (1953), pero considerado gijonés desde siempre, apareció muerto en su domicilio. Protagonista desde hace semanas de una deliciosa exposición en el Museo Evaristo Valle, titulada 'Geometría sonriente', que aún se puede visitar, falleció por causas que aún se desconocen, aunque padecía epilepsia, que desde hace un tiempo estaba muy controlada.

Según fuentes policiales, fue su empleada de hogar, que acudía a las diez de la mañana a su vivienda, como cada día, la que le encontró cadáver.

Pico estaba considerado uno de los mejores pintores de este Norte y era querido no solo por quienes le rodeaban a diario, especialmente en su ciudad, sino por sus compañeros de paleta.

Pelayo Ortega al que idolatraba, solo tiene buenas palabras para él, como Amador Fernández, de Cornión, su galería de cabecera.