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P. LAMADRID
Martes, 2 de agosto 2016, 07:15
Es un hecho probado que la Feria Internacional de Muestras de Asturias (Fidma) es un gran motor de empleo en agosto. Aproximadamente, 600 estands se instalarán en el recinto ferial Luis Adaro entre el 6 y el 21 de agosto. Cada uno ellos, «como mínimo», cuenta con una media de entre tres y cuatro personas «que apoyan la realización de la Feria, aparte del propio personal». Así lo explicó ayer el director de actividad ferial de la Cámara de Comercio de Gijón, Álvaro Muñiz, quien apuntó la cifra de 2.400 empleos, resultante de una simple operación matemática.
Como ya es tradicional, el sector del confort y el hogar -en el que se incluyen los estands de muebles- será el que más peso específico tenga en la próxima edición. Junto a él, se sitúan la automoción y la moda y los complementos. A cuatro días de la inauguración de la 60 edición, aún quedan muchos preparativos por llevar a cabo. Los pabellones están completamente vacíos y solo algunos expositores han comenzado a trasladar las primeras cajas al recinto. No obstante, es la tónica habitual del certamen que, como por arte de magia, se transforma en una ciudad en miniatura en un par de días. No cabe duda de que el viernes todo estará listo a orillas del Piles.
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