El juzgado archiva las denuncias contra el padre Chus por supuestos abusos

Segunda denuncia por abusos sexuales y segundo archivo de la causa. El juzgado de Instrucción número 4 de Gijón ha decretado el sobreseimiento del procedimiento penal abierto contra el padre Chus por unos supuestos abusos a un menor de edad residente en La Calzada. Después de diez meses de investigación, la jueza no ha apreciado indicio alguno de delito en el testimonio tanto de la madre del adolescente como del propio chico. Las pruebas practicadas exculpan de cualquier responsabilidad al religioso, expulsado el año pasado del sacerdocio. La resolución judicial aún no es firme, ya que cabe recurso por parte del denunciante.

Se trata del mismo juzgado que ya había archivado hace cuatro años otra denuncia de similar contenido y que tenía como supuestas víctimas a dos gemelos de origen ecuatoriano menores de edad que residen en El Llano. En ambos casos fueron sus madres quienes acudieron a la Policía Nacional y las dos referían que sus hijos habían sido víctimas de abusos sexuales en el piso que el padre Chus tiene en la calle de Donato Argüelles y en el que da alojamiento a nueve jóvenes con necesidades especiales.

Una vez conocida la nueva exculpación judicial, Jesús María Menéndez Suárez, aseguró a EL COMERCIO que «estaba muy tranquilo en toda la fase de instrucción, pero no es plato de buen gusto encontrarte con algo así, aunque tanto yo como todos los que me conocen saben que es una mentira grandísima». «Ahora estoy en la gloria», añadió. Desde el primer momento el padre Chus viene manteniendo que «todo se trata de una venganza por parte del arzobispo, que está visto que no logra salirse con la suya por mucho que le pese».

«Siempre me porté muy bien con esos chicos cuando venían por casa; les di dinero pero no por nada a cambio, sino porque no tenían recursos y simplemente les quería ayudar. Han confundido la caridad con otra cosa», asegura.

El archivo de la denuncia por abusos difiere del comunicado emitido hace un año por el Arzobispado de Oviedo en el que daba detalles sobre la expulsión del sacerdocio del padre Chus, exprofesor de Religión de los institutos Jovellanos y Fernández Vallín y expárroco de Castiello de la Marina, en Villaviciosa. «Además de acciones pecaminosas según la ley de Dios, constituyen también delitos según el Derecho y la normativa actual de la Iglesia», se afirmaba en aquel comunicado, en el que se destacaba que la expulsión «fue una decisión tomada directamente por el Papa Francisco y es inapelable». «Por mandato de la Santa Sede se puso en marcha en la Archidiócesis de Oviedo un proceso administrativo penal en el que se tomó declaración a las víctimas, a los testigos y al imputado. Asimismo, se recogieron las pruebas documentales que existen sobre el caso y se mostraron al imputado y a su abogado para que ejercieran su derecho de defensa», apuntaron.

El religioso ha anunciado ya que «una vez archivada la denuncia por la vía penal, lucharemos para que se demuestre mi inocencia en el Vaticano».