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N. PRIETO
Miércoles, 8 de julio 2015, 00:17
Isidro Alonso Sierra, responsable de la contabilidad de la UTE Dique Torres, todavía no ha podido ser llamado a declarar porque se encuentra en paradero desconocido.
La Audiencia Nacional ha pedido su localización para que pueda comparecer ante el juez el próximo mes de septiembre. Otro testigo, el exgerente David López Navarrete, con el que sí se ha podido contactar, completa la lista de comparecencias previstas hasta ahora, si bien todo apunta a que las partes personadas pedirán la declaración de más personas.
La impresión general, en todo caso, es que el turno de declaraciones quedó ayer suspendido hasta septiembre y que no hay fecha concreta para reanudar las citaciones tras el paréntesis vacacional.
Fuentes de la Audiencia Nacional indicaron ayer a EL COMERCIO que no es habitual que un testigo no pueda ser localizado. De momento, lo inmediato es intentar nuevamente la citación del contable pero, si no fuera posible, el procedimiento pasa al parecer por preguntar a la parte que ha solicitado su comparecencia, en este caso la Fiscalía, si la considera imprescindible para continuar el caso.
A la Olaf le resultó imposible en su día acceder a la contabilidad de Dique Torres.
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