Baños de ola al estilo de los de Isabel II

17 de julio 1847. El diario 'La Gaceta de Madrid' publicaba por aquel entonces el primer anuncio de los baños de ola, «habilitados en la espaciosa playa del Sardinero de Santander, que -apuntaba- ha empezado a ser concurrida por sus naturales y muchos forasteros». Catorce veranos después, Isabel II llegaba a la ahora capital cántabra en compañía de la Familia Real. ¿Sus intenciones? Tomar baños de ola y, de paso, olvidarse por un tiempo de los calores de Madrid.

Siglo y medio después, la Asociación Libre de Mujeres de La Corredoria (Oviedo) decidió recuperar aquellos baños. Llevan 20 veranos bañándose, aunque solo seis recurriendo a los trajes de época, que destacan, en algunos casos, por sus rallas. Tampoco dudan en servirse de pequeñas sombrillas para protegerse del sol en la orilla, al igual que hiciese más de un cortesano, y de gorros de baño.

Laura Nieto, presidenta del colectivo, y Tere Ruiz, tesorera, explicaron el paso dado, que las llevó de pegarse chapuzones con trajes de baño actuales a hacerlo con modelos de la época isabelina: «Tenemos un taller de vainica. La idea nació allí». Y así es que durante cinco días recorrerán diferentes arenales asturianos. Ayer tocó San Lorenzo. «Para muchos, sobre todo para las personas mayores, supone una oportunidad de disfrutar de la playa», apuntaron. Todo ello, por 10 euros, con autobús y merienda incluidos. «¿A dónde te van a llevar por 10 euros cinco días seguidos?», se preguntaban entre risas ambas.

En esta ocasión son casi una treintena de mujeres las que decidieron inscribirse a tan peculiar iniciativa. «También vienen con sus nietos y nietas», añadieron Nieto y Ruiz.

Presidenta y tesorera de la Asociación Libre de Mujeres de La Corredoria también aprovecharon para animar a los hombres a participar. «¡No vienen! Tenemos un problema muy serio con ellos. Es una actividad para todos los públicos. No importa el sexo ni la edad», apuntaron ambas.

Dejando de lado todo tipo de prejuicio o pudor, lo que tratan de hacer desde esta entidad es rescatar la forma tradicional de disfrutar de la mar a través de los baños de ola.