Culebrón Miss Universo

El escándalo persigue a Miss Universo 2015. Cuando aún se intenta digerir la sonrojante metedura de pata del presentador Steve Harvey, que nombró ganadora por error a la representante de Colombia, una nueva tormenta ha estallado de lleno. En concreto, sobre la corona de su flamante y aún incrédula vencedora, la filipina Pia Alonzo Wurtzbach. La joven, de 26 años, acapara ríos de tinta y flashes de los paparazzi. Y no por ser la aspirante más veterana en subirse al trono de la belleza mundial. Interesa, y mucho, porque acaba de colgársele un rimbombante cartel: el de amante del presidente de su país, Benigno Aquino III.

Los rumores saltaron tímidamente a inicios de año. La propia Pia confesó en un programa de televisión su trato cercano con el jefe de Estado. «Hablo con él. Es un hombre agradable, divertido y muy gracioso», dijo, sin rubor. Y añadió: «Él está muy ocupado con el país y yo con Miss Universo». La presentadora guardó silencio y miró hacia otro lado en lugar de intentar escarbar en la que podría ser la historia del año en Filipinas. Su reacción era comprensible por tratarse nada menos que de Kris Aquino, la hermana del mismísimo mandatario.

El leve runrún que se escuchaba desde entonces en las redes sociales es ahora un avispero de comentarios de todo tipo. A nadie ha dejado indiferente que el presidente se deshiciera en halagos en cuanto supo que la ganadora del certamen había sido Pia. «¡Enhorabuena!», lanzó a través de su perfil personal de Twitter junto a una foto de su 'especial' amiga. Por medio de su portavoz, Edwin Lacierda, subió un poco el tono de su felicitación. «Durante su viaje ha mostrado al mundo la belleza, inteligencia y elegancia que caracterizan a la mujer filipina».

Pia guarda un silencio cómplice. Aunque no maquilla su admiración por el jefe de Estado, prefiere jugar al despiste para huir de los focos mediáticos. Sabido es, sin embargo, que Aquino tiene fama de mujeriego y a sus 55 años se ha convertido en el soltero de oro de Filipinas. Además de su camuflada historia de amor con la nueva Miss Universo, al jefe de Estado se le ha relacionado con su estilista, Liz Uy, y con la presentadora de televisión Grace Lee. Desde que puso fin a su relación con la también política Shalani Soledad se ha lanzado a las conquistas. «Antes tenía esperanzas de encontrar esposa. Ahora tampoco es que me apetezca», reconoció al rotativo 'South China Morning Post'.

Los organizadores de Miss Universo pasan de puntillas sobre si el corazón de su reina de la belleza está ocupado por nada menos que el presidente filipino. No están para hacer ruido, que bastante tienen con desenmarañar el entuerto que causó Harvey con su «terrible error». Aunque se disculpó públicamente y aseguró sentirse avergonzado, el malestar sigue latente. Y a río revuelto, Donald Trump -anterior propietario del certamen- ha salido al ruedo con una singular propuesta. Quiere que la colombiana Ariadna Gutiérrez y Pia sean declaradas «coganadoras». «Esto conmigo no hubiera pasado nunca», alardeó.

De postre, Donald Trump

Con o sin Trump, lo que no falta en este tipo de concursos es la controversia. El candidato republicano que más votos cosecha para llegar a la Casa Blanca ya se encargó de caldear los ánimos con unas xenófobas declaraciones sobre los mexicanos. Como consecuencia, el país azteca a punto estuvo de no participar. Hay que reconocer, no obstante, que esta 64 edición de Miss Universo ha sido la más desafortunada. Hasta las misses se han rebelado. La alemana Sarah-Lorraine Riek se negó a felicitar a Pia porque le indigna el ridículo que pasó la colombiana, a la que le despojaron de la banda y la corona instantes después de ser investida. Tampoco es que ella y el resto sientan especial afinidad por la ganadora: «Ninguna de nosotras votó por Filipinas».

Quizá el único consuelo que pueda extraerse del prestigioso concurso es que Harvey no es el primero en patinar. Antes que él ya lo hizo en 2000 el presentador Francisco Zamora en el certamen local de Miss Puerto Rico. Le ocurrió exactamente lo mismo: en vivo y en directo ante miles de personas se confundió al decir el nombre de la ganadora. Más reciente, en 2010, sucedió en el Australia Next Top Model. La presentadora proclamó a la vencedora y tuvo que rectificar cuando las dos finalistas celebraban en el escenario.

Las misses tampoco es que salgan airosas por sí mismas. Sus desconcertantes respuestas han pasado a la historia como el mejor de los remedios para arrancar carcajadas. O para tirarse de los pelos. Memorable fue la explicación que dio en 2009 una candidata a Miss Panamá al ser preguntada por el pensador chino Confucio. «Fue uno de los que inventó la confusión. Uno de los chinos japoneses de lo más antiguo». Por su parte, en 2007, una de las aspirantes a Miss EE UU Adolescente razonó que la quinta parte de la población no sabía ubicar el país porque «no tienen mapas». Este año, la 'perla' la ha soltado Miss Italia, Alice Sabatini: «Me habría gustado vivir la Segunda Guerra Mundial. Sucedieron cosas terribles. Hoy es todo tan plano, tan rutinario...».