«No somos rojos peligrosos, solo somos rojos»

José Manuel Zapico lleva semanas enarbolando la bandera del sindicato «de clase» y prometiendo un «cambio» en la organización para recuperar su posición «más ofensiva» en la defensa de los derechos de los trabajadores. Ayer volvió a incidir en la idea de que para él es irrenunciable el binomio «negociación y movilización», pero, ante quienes abogaban por una opción más moderada, lanzó un mensaje tranquilizador. «No somos rojos peligrosos, somos solo rojos. Venimos a arrimar el hombro desde la total lealtad a la confederabilidad».

Le escuchaba desde la primera fila Unai Sordo, dirigente sindical vasco llamado a sustituir a Ignacio Fernández Toxo al frente de CC OO, quien también subrayó la necesidad de que la organización se adapte a la nueva realidad laboral.