Pablo Carreño cambia de circuito

Y eso que ayer no salió vencedor del duelo que le propuso Peugeot, marca de la que es embajador. Al tenista gijonés por momentos pareció resbalarle alguna gota de sudor por el rostro. Pero, en esta ocasión, no por el calor de una pista de tenis. Sino por el del asfalto de un trazado mítico como el del Jarama.

A Carreño se le vio suelto, alejado de los grilletes de la presión de los partidos de tenis. El tenista formado en la cantera del Grupo Covadonga y su compañero David Ferrer llevaron su rivalidad de las pistas de tenis al circuito madrileño del Jarama en una carrera a los mandos de los nuevos Peugeot 308 Gti. No le faltaron caballos: 270. A la lucha se incorporaron también otros dos nombres de la marca: el piloto Carlos Sainz y la cantante Edurne.

Todos ellos de blanco, salvo Sainz, con el mono oficial del Team Peugeot Total con el que competirá, el próximo enero, en el Dakar, participaron en una carrera que, por lógica, se llevó el 'maestro' y ahora padre del piloto de F-1 de igual nombre, por delante de la cantante y los dos tenistas.

El gijonés ha dado por finalizada la temporada con su participación en el Torneo de Maestros. Ahora, toca descansar y comenzar una dura preparación con vistas al nuevo ejercicio, que dará comienzo en enero.