Paso atrás del Sporting B en su camino hacia el ascenso

Víctima del pragmatismo del Olot, que se defendió con mucho orden y sacó mucho provecho de una escaso volumen ofensivo, el Sporting B sufrió un revés en sus aspiraciones de ascenso. El filial rojiblanco sufrió la segunda derrota de la temporada en Mareo en el momento más inoportuno, cuando el margen de error se reduce y se arriesga un alto porcentaje de éxito de la temporada.

Un solitario gol de Uri, al recoger un balón suelto dentro del área tras un centro de Blázquez que Juan Rodríguez no acertó a despejar, obliga al conjunto dirigido por José Alberto López a ganar la próxima semana en Olot si quiere abrazar el ascenso. La pegada del conjunto gerundense desveló un choque en el que el conjunto gijonés fue de más a menos y terminó atrapado en la telaraña defensiva tejida desde el banquillo por Calderé. El ímpetu de los jóvenes sportinguistas se vio neutralizado por el oficio de su adversario catalán, sufridor para achicar agua cuando subió la marea rojiblanca.

Tras un inicio repleto de imprecisiones en el que Marc Mas rozó la apertura del marcador al cabecear fuera un buen servicio desde el costado derecho, el Sporting B se desperezó con el dinamismo de Pablo Fernández y el descaro de Isma Cerro para asentarse en campo contrario. Encendió la mecha el conjunto sportinguista frente a un público entregado y la traca estuvo a punto de explotar superado el cuarto de hora de juego. Los atacantes locales presionaron la salida de balón rival y Pablo Fernández asistió a Claudio, quien tras deshacerse del pegajoso marcaje de David Escudero sacó un disparo a quemarropa con su pierna derecha que Ginard repelió en un alarde de reflejos.

Los catalanes supieron rebajar la efervescencia del conjunto gijonés, aunque todavía se vieron inquietados en un par de conexiones entre Pablo Fernández y Jaime Santos que el ovetense no culminó entre los tres palos antes del descanso. En la segunda mitad, los corsés tácticos se aflojaron y el balón fue de área a área con una frecuencia más elevada. Ginard estuvo atento para finiquitar un contragolpe orquestado por Isma Cerro con un balón profundo al que no pudo llegar Nacho Méndez y antes de alcanzar el ecuador del segundo acto llegó el jarro de agua fría para Mareo con el gol visitante.

Reaccionó rápido José Alberto nutriendo a su equipo con más músculo rematador al dar entrada a Rubén Sánchez en detrimento de Isma Cerro, pero entonces el Olot acentuó su planteamiento defensivo. Víctor Ruiz intentó encontrar la llave del candado con centros desde el costado izquierdo y Nacho Méndez con un zurdazo lejano, aunque fue Pablo Fernández quien más cerca estuvo de lograr el empate con un disparo desde dentro del área que terminó en córner tras estrellarse en un zaguero visitante. El Olot hizo gala de su veteranía y arañó con constancia segundos al reloj en una recta final de duelo en el que el Sporting B echó el resto sin premio.