La Segunda B, pendiente del 'efecto dominó'

El 'caso Murcia' no solo mantiene en vilo a los clubes de Segunda División. Con el descenso administrativo del conjunto 'pimentonero', el Grupo 1 de la categoría de bronce del fútbol español acogió un nuevo integrante que se muestra reticente a aceptar el mandato de la Liga de Fútbol Profesional (LFP).

El pulso entre el club presidido por Jesús Samper y la LFP ha llevado la incertidumbre también al tercer escalón del fútbol español, que también mantiene la incertidumbre sobre un inicio liguero que, como todo indica, hoy verá oficializado su aplazamiento. El Murcia se aferra a su baza judicial y el organismo presidido por Javier Tebas no se ha desviado ni un milímetro de su postura inicial, por lo que surge una confrontación que amenaza con alterar la fisionomía del grupo en el que militan los conjuntos asturianos. Así, se abre la posibilidad de que el grupo vuelva a confeccionarse con 19 equipos, como ya había sucedido la campaña pasada con la desaparición del Salamanca.

Si el conjunto murciano finalmente no saliese una competición, la opción más remota de las que se barajan, dejaría una vacante que podría ser ocupada por otro conjunto. En ese caso, el Caudal reanudaría su lucha por comenzar la temporada en la categoría que perdió la pasada campaña.