Ruma Barbero: «Las publicaciones en papel siguen teniendo un plus»

«Es una gran noticia que se reedite un libro en lengua asturiana». Lo decía ayer Ruma Barbero (Gijón, 1971) -«pon que soy de Somió»-, que presentaba en el Ateneo Obrero la reedición de 'Manzajú', una obra en la que a través de saltos temporales repasa «las experiencias que recuerdo de cuando era niño y de mi llegada a la Universidad». Por medio de estas historias y anécdotas consigue así explicar ese paso de la niñez a la edad adulta, «de cómo una cultura grande va sustituyendo a esa cultura más pequeña de cuando somos pequeños», detallaba.

Pero hacía doblete Barbero, puesto que presentaba también 'Aguantando cachones 2', la segunda parte de un libro en el que «sigo contando historias de anécdotas infantiles, recuerdos relacionados con la familia, la identidad cultural asturiana...». Visto el éxito del primero, se ha decidido a sacar el segundo. «La mayor novedad es que es en color», añade. Una serie de historias gráficas de extensión corta que tienen también su reflejo en el blog del mismo nombre. «El blog nació para introducir ideas cortas que no daban para una historieta más larga, aunque ahora cada vez lo utilizo más y ya cuelgo también cosas más elaboradas. Aún así, si tiene que elegir, lo tiene claro: «Sigue prestándome más el papel, sigue pareciéndome un plus para mí y para los lectores. Para los de nuestra quinta, sigue teniendo un valor añadido».

En cuanto a la salud de la lengua asturiana, Barbero es pesimista. «Sigo viéndolo como siempre, desde que empecé lo veo igual. Hay un buen nivel literario, también en la música, con mucha variedad, pero en términos generales se ve que no tiene el apoyo suficiente para conectar con los jóvenes. Sería fundamental programación infantil en lengua asturiana, películas que usen la lengua, aunque sea en emisiones nocturnas... No pido que sea en prime-time».