Diego Carcedo, en Castropol: «Sin un periodismo libre no hay democracia»

La Casa de Cultura de Castropol acogió ayer la conferencia del presidente de la Asociación de Periodistas Europeos y colaborador de EL COMERCIO, Diego Carcedo, quien acudió a impartir una conferencia dentro del décimo Foro Comunicación y Escuela titulada 'Medios de comunicación y democracia en España'.

Medio centenar de personas acudieron a esta conferencia, en la que se puso sobre la mesa la relevancia de la labor de los medios de comunicación. «Sin un periodismo libre no hay democracia», dijo Carcedo, quien hizo un amplio repaso de la historia de los medios en España. El periodista recordó que «un dictador lo primero que hace es anular la libertad de prensa», y habló de la figura del censor durante el franquismo. «Donal Trump lo intenta, pero no va a conseguir doblegar a la prensa».

En su conferencia ensalzó el papel de los medios en la transición. «Hubo una transformación radical», dijo, explicando que las empresas supieron mejorar realizando inversiones. Además, destacó que la pluralidad de empresas «ofrece opiniones diferentes», ya que a su juicio, «la objetividad es imposible. Los periodistas somos personas, lo que buscamos es la verdad».

Diego Carcedo cree que las 'fake news' (noticias falsas) que se difunden a través de las redes sociales están haciendo mucho daño a la profesión, ya que, en esos ámbitos «no se rectifica».

Tras la conferencia se llevó a cabo una charla coloquio moderada por el director de EL COMERCIO, Marcelino Gutiérrez, y en la que los presentes pudieron preguntar sobre diversos asuntos, entre ellos los límites de la libertad de expresión, cuestión que fue respondida por Carcedo. «El límite está en el código penal», apuntó. El periodista agradeció al director de este periódico que «en 22 años que llevo colaborando, nunca me cortasteis ni una sola palabra», asegurando que «la libertad de prensa en España es enormemente satisfactoria».

Al finalizar la conferencia el director del Foro, Luis Felipe Fernández, entregó a Diego Carcedo y Marcelino Gutiérrez una estatuilla conmemorativa del evento y regaló a la periodista Cristina García Ramos, esposa de Carcedo, un ramo de flores. La bibliotecaria, Manuela Busto, hizo entrega de dos libros a ambos periodistas, quienes agradecieron su presencia en este proyecto, que «debería exportarse a otros lugares de España», apuntó Carcedo.