Evaristo Valle y Nicanor Piñole, naturaleza comparada en sus museos

Las telas de Evaristo Valle y de Nicanor Piñole están plagadas de naturaleza. Nada tiene que ver la pintura de uno, claramente más atraído por la emoción de las formas, con la del otro, de potente vocación realista. Sin embargo, hay en el hecho de recurrir al paisaje asturiano para contar sus desvelos, sus deseos y su tiempo, para «inscribir su crónica emocional y vital» un territorio real que les une. De sus coincidencias y también de sus contrastes hacen hoy actividad extraordinaria los museos que llevan sus nombres. El que ocupa el viejo asilo de Pola de la gijonesa plaza de Europa, en el mismo contexto urbano en el que prácticamente transcurrió toda la vida de Nicanor Piñole, que residía en la casa de enfrente, y el de Somió, que guarda celosas anécdotas en una finca plagada de esculturas en torno a la obra de Evaristo Valle.

El programa, que se cierra hoy comienza a las 17.30 horas y culmina tres horas después, tras una visita guiada que aborda conjuntamente la obra de los dos autores coetáneos, unidos también por los mismos estímulos creativos, «aunque desde posicionamientos estéticos diferentes».

La actividad (4 euros adultos, menores de 4 años gratuito y niños de 4 a 16 años 3 euros) se inicia en la plaza de Europa y concluye en el jardín del Museo Evaristo Valle. Itinerario. La entrada incluye también el traslado de ida y vuelta y las plazas son limitadas. Es necesario realizar una inscripción en Infogijón (Puerto Deportivo, espigón central de Fomento y Escalerona, por teléfono ( 985 341771) e internet.