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SHEYLA GONZÁLEZ
AVILÉS.
Domingo, 24 de diciembre 2017, 01:35
Cada Nochebuena la magia de L'Anguleru enciende las calles y le permite dejar regalos a todos los niños asturianos que creen en él. Ayer este ilustre personaje de la tradición regional recibió su serazu mágico, el que le permite repartir presentes por todas las casas y lo hizo rodeado de niños en la biblioteca Bances Candamo de Avilés. L'Anguleru llegó a la ciudad rodeado de sus ayudantes, Lolina La Rulera y otros llendadores de la ría.
A ritmo de los Llendadorinos del tambor, de la Bandina Infantil de San Pedro, y ataviado con su traje amarillo de pescador, L'Anguleru mantuvo un breve encuentro con los pequeños en la plaza de España. Allí repartió algunas postales para que los más rezagados pudieran escribirla y enviársela y así tener un regalo esta noche. Después, desfilando con gran ritmo llegó a la sala infantil de la biblioteca, donde le esperaba otra decena de niños y la concejala de Cultura, Yolanda Alonso, que fue la encargada de dar paso a una de las tradiciones más especiales, el encantamiento del serazu.
Este utensilio que se utiliza por los pescadores de angula es el instrumento mágico que utiliza L'Anguleru para cumplir los deseos de los más pequeños. Ayer fueron estos quienes se encargaron de cargarlo de magia. Gonzalo Fernández, de la Bandina de San Pedro, fue quien leyó en encantamiento, mientras que Isabel y Mario, otros dos niños sujetaban el serazu junto al pescador y a la concejala. Dichas las palabras clave, L'Anguleru prometió a todos los presentes un regalo esta noche, no sin antes preguntarles por su comportamiento. «¿Habéis trabajado mucho? No os pregunto si fuisteis buenos que ya veo que tenéis cara de trastos», les decía en tono de humor, desatando las risas de todos.
También les quiso dejar claro que él, al contrario de Papá Noel, no entra por la chimenea de las casas sino «por la puerta, que tengo llave de todas». Mario Martínez se atrevió a darle su carta en directo. En ella había escrito muchas peticiones, casi todas ellas de Playmobil, aunque también quiere un patinete. El pequeño fue el primero en probar el arte de la pesca de la angula. Aunque en la biblioteca no hay río donde puedan proliferar, los Llendadores se encargaron de hinchar pequeños globos de colores que sirvieron para la toma de contacto.
Un buen grupo de niños se atrevieron a utilizar un pequeño serazu para pescar los globos con la ayuda de L'Anguleru. Además, el personaje asturiano aprovechó la ocasión para contarles sobre la tradición que marca su historia. También quiso agasajarles con un pequeño paquete de castañas de chocolate y un cuento en llingua asturiana. Mientras, Lolina la Rulera y los Llendadores de la Ría ayudaron a los pequeños. «Estamos nosotros más nerviosos que ellos. Vienen con mucha calma y se les ve la alegría», decía Lolina la Rulera, que también les explicaba que su misión es la de «traer ilusión y alegría a todas las casas».
Por último, invitaron a todos los presentes a participar en la tradicional cabalgada de L'Anguleru en San Juan de La Arena, que tendrá lugar esta tarde a partir de las 18.30 horas. El desfile dará comienzo en el puerto pesquero.
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